DONOSTIA. La asociación de familiares de presos de ETA Etxerat ha reconocido que es positivo escuchar del partido que lidera el nuevo Gobierno en España voces en favor del acercamiento de los presos de ETA a cárceles vascas, pero ha pedido "mucha prudencia" hasta que las palabras se conviertan en "hechos".
Los portavoces de Etxerat Urtzi Errazkin y Patricia Vélez han hecho estas declaraciones en una rueda de prensa en San Sebastián, en la que han urgido al excarcelamiento de los 19 presos que, según sus datos, sufren enfermedades graves e incurables "bajo criterios estrictamente médicos".
Errazkin se ha referido al nuevo Gobierno de coalición en España y ha reconocido que es "mejor" escuchar del partido que lo lidera posicionamientos en favor del acercamiento de los reclusos de ETA frente a la postura adoptada por anteriores ejecutivos que advertían de que "no harían nada" al respecto.
No obstante, Errazkin ha pedido "prudencia" y ha dicho que es mejor "mantener los pies en el suelo" ya que, según ha asegurado, hace año y medio el presidente Pedro Sánchez hizo unas declaraciones en este sentido y "no se dieron los cambios que él prometió".
Errazkin ha insistido en la necesidad de introducir modificaciones "reales" en política penitenciaria ya que, según esta agrupación, de los 250 presos que integran este colectivo 69 sufren algún tipo de enfermedad orgánica, de ellos 16 en estadio grave e incurable.
En cuanto a los reclusos que padecen algún tipo de enfermedad psíquica, Etxerat tiene contabilizados en estos momentos a 16 presos, de los cuales 3 también presentan un pronóstico severo.
Etxerat ha urgido a la excarcelación de los 19 presos que tienen "pronóstico grave y riesgo de muerte" y que están afectados por cánceres, dolencias cardiológicas o enfermedades mentales, mientras que reclama el traslado de los enfermos crónicos, sin riesgo evidente de fallecimiento, a la cárcel alavesa de Zaballa, donde la asistencia "depende de Osakidetza y es de más calidad y cercana".
Los portavoces de Etxerat han comparecido acompañados por el psicólogo Fernando Alburua y el médico Xabier Onaindia, quienes han detallado las cifras de presos de ETA aquejados de distintas patologías y han denunciado una serie de "deficiencias" en su asistencia relacionadas como "retrasos en consultas, pruebas o intervenciones quirúrgicas".
