BILBAO. El experto designado por el PSE para elaborar un texto articulado del nuevo estatuto de Euskadi, Alberto López Basaguren, asegura que su responsabilidad ha sido llevar al Parlamento Vasco una propuesta de reforma y actualización del Estatuto vasco “viable jurídicamente”. A su juicio, las propuestas planteadas por el PNV y EH Bildu, y de un modo más tibio también por Elkarrekin Podemos, en torno al derecho a decidir y la relación bilateral entre Euskadi y el Estado español no encajarían en esa premisa de encaje legal y constitucional.
Tras más de un año de trabajo en secreto, los expertos de PNV (Mikel Legarda), Elkarrekin Podemos (Arantxa Elizondo) y el propio López Basaguren han acordado una propuesta técnica de nuevo estatuto que han trasladado al Parlamento Vasco para que los partidos políticos consensuen y cierren el texto estatutario definitivo. El texto está consensuado por los tres expertos -y por los partidos que los han designado- en un alto porcentaje de los 145 artículos, especialmente en lo referido a los derechos de las personas y los derechos sociales. Pero las diferencias han aflorado en cuestiones troncales como el derecho a decidir, el blindaje de las competencias vascas, el Concierto Político y la consulta habilitante. López Basaguren ha sido el que más disensos ha firmado en estas cuestiones y las ha plasmado en votos particulares a los artículos que no suscribe.
En referencia al derecho a decidir, sostiene que quien quiera modificar los elementos sustanciales del sistema autonómico debe plantear la reforma de la Constitución española, no la del Estatuto de autonomía y pone como ejemplo la reforma del Estatut de Catalunya. En un escrito publicado ayer, asegura que la reforma estatutaria solo puede aportar cambios de calado en lo que se refiere al interior de la comunidad autónoma, pero no “cambios cualitativos” del sistema autonómico en sí mismo.
A su juicio, transitar por esta vía solo genera “frustración” por la imposibilidad de hacer efectivo el objetivo perseguido. Por ello, subraya que su encomienda ha consistido en lograr un texto que pudiese concitar “el más amplio consenso” entre las fuerzas políticas y la sociedad vasca, con el límite del “marco constitucional” para que sea viable. “Quien quiera romper el marco constitucional, que lo plantee con transparencia y que trate de lograr el apoyo de la mayoría de la sociedad vasca, pero que indique con transparencia qué supone esa opción”, en referencia al procés catalán”.
A juicio del catedrático de Derecho Constitucional por la UPV/EHU, en un momento en que parece haberse impuesto “la imposibilidad de renunciar a las posiciones propias, por miedo a ser calificado de blando o traidor”, la capacidad de alcanzar consensos “parece una debilidad”, pero, por el contrario, cree que es lo único que “nos permitirá sobrevivir como sociedad democrática y la convivencia entre diferentes”. López Basaguren cree que es preciso renunciar a “posiciones propias”, que pueden ser inasumibles para otros, en aras de intentar integrar a más partidos. Por ello, reconoce que siente “frustración” por no haber logrado integrar en el texto por él suscrito a más miembros de la comisión de expertos.
