Rusia exigirá a Estados Unidos “firmes garantías de seguridad” en las consultas del próximo 10 de enero, declaró ayer la portavoz del Ministerio de Exteriores ruso, María Zajárova, que además responsabilizó a Europa de ser responsable del deterioro de la seguridad europea. “Durante estas conversaciones exigiremos firmes garantías de seguridad para Rusia, en particular el cese del avance de la OTAN al este y el no emplazamiento de sistemas de armas que amenacen a nuestro país junto a sus fronteras”, afirmó en una comparecencia ante la prensa.

Zajárova recalcó que en esta próxima cita está previsto el debate de las propuestas presentadas por Moscú a Washington, el acuerdo entre Rusia y EE.UU. sobre garantías de seguridad y el tratado sobre medidas de seguridad entre Rusia y la OTAN. La portavoz de la diplomacia rusa reiteró que las conversaciones están previstas para el próximo 10 de enero y afirmó que “no existen alternativas a esta fecha”.

Al comentar el impacto que han tenido a nivel internacional las propuestas rusas, Zajárova constató que Europa no tiene una posición unívoca y de hecho se escucha “una polifonía absoluta” de opiniones. “En los últimos tiempos se han escuchado muchas declaraciones de la Unión Europea (UE) sobre las recientes propuestas presentadas por Rusia, y lo más interesantes es que cada vez escuchamos declaraciones distintas al respecto”, observó.

En particular, responsabilizó a la UE de “haber hecho mucho con sus propias manos para incrementar las tensiones” en el Viejo continente. Se refirió al formato Asociación Oriental, creado por Bruselas en 2009 y “dirigido a contrarrestar las iniciativas integradoras rusas y en general urdir para sí esferas de influencia en el espacio postsoviético”. “La UE, al son de acusaciones no fundamentadas, etiquetó en sus doctrinas a nuestro país como un reto estratégico, y casi le convirtió en la principal fuente de ciertas amenazas híbridas para su seguridad”, dijo.

La diplomática rusa subrayó que si Bruselas lo desease sinceramente “podría hacer mucho más para evitar un desarrollo de la situación inaceptable no solo para Rusia, sino en general para el desarrollo de nuestra interacción”. “No hicieron nada al respecto”, denunció, y llamó a Europa a abandonar la “gimnasia retórica” y trabajar en el fortalecimiento de la seguridad internacional.

Consultas de Blinken

En este contexto, el secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, conversó telefónicamente la noche del pasado miércoles con sus homólogos de Francia, Jean-Yves Le Drian; Alemania, Annalena Baerbock, y Reino Unido, Elizabeth Truss, sobre el aumento de la tensión en Ucrania ante los movimientos en las últimas semanas de tropas rusas en la frontera con ese país. Así lo confirmó en un comunicado el portavoz del Departamento de Estado, Ned Price, quien detalló que discutieron la importancia de la “coordinación continua para disuadir cualquier agresión rusa contra Ucrania”.

Los funcionarios “afirmaron el consenso entre los aliados y socios para imponer a Rusia consecuencias masivas y costos severos por tales acciones”, apuntó la nota.