- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, dio por acabada su comparecencia sin más aviso después de que una periodista asiático-americana le hiciese una pregunta a la que él le respondió: “Debería usted preguntar a China”.

Weijia Jiang, corresponsal del canal CBS ante la Casa Blanca, preguntó al mandatario por qué estaba tratando los test para el coronavirus como si fuera una competición mundial cuando había 80.000 muertos en el país. El presidente le espetó directamente a Jiang, nacida en China y residente en Estados Unidos desde que tenía dos años: “No me pregunte a mí. Hágale esa pregunta a China, ¿Ok?”.

A partir de ese momento, el presidente pasó a conceder la palabra a Kaitlan Collins, corresponsal de CNN para la Casa Blanca, quien había sido interrumpida por la periodista de CBS, visiblemente molesta. “¿Por qué me está haciendo esa pregunta a mí concretamente?”, le inquirió Jiang. “Solo lo estoy diciendo”, se defendió el presidente. “No se lo digo a nadie en concreto. Se lo digo a cualquiera que haga una pregunta desagradable”, prosiguió Trump, usando un término con el que muy a menudo califica las preguntas de los periodistas e incluso a ellos mismos.

China anunció ayer una nueva lista de 79 productos a los que, cuando sean importados desde Estados Unidos al país asiático, eximirá de los aranceles adicionales impuestos por Pekín en el marco de la larga guerra comercial que libra con Washington.

Esta es la segunda tanda de exenciones arancelarias publicada por China tras la de septiembre de 2019, que incluía materias primas agrícolas como soja o porcino o productos petroquímicos.

En la nueva lista figuran, entre otros, minerales de tierras raras, equipos para radares de aeronaves, partes para semiconductores, desinfectantes médicos, diversos metales preciosos o productos químicos.