Apagan fuegos y protegen a las personas, pero en sus ratos libres también salvan camiones. Los bomberos del Ayuntamiento de Gasteiz llevan cerca de un año aprendiendo de mecánica para reparar dos camiones históricos. Se trata de un camión con escalera de 30 metros matriculado el 28 de febrero de 1969 y otro camión bomba, todavía más histórico, matriculado en 1927. De manera altruista y voluntaria, Egoitz Anda, Julen Olivera y Oier Saenz de Cámara, los tres bomberos más implicados en el proyecto, decidieron poner en marcha estos camiones y animaron al resto del equipo para que entre todos lo pudieran, al menos arrancar, aunque las labores no están siendo fáciles: "Al principio parecía que nos habíamos puesto a enredar pero con el paso de los días y semanas de trabajo, todo fue cogiendo forma. Nos hemos ido buscando la vida y está siendo muy gratificante", explica Julen. Y, cuando dice que se han ido "buscando la vida", se refiere a toda la labor de aprendizaje que están realizando para lograr dar un paso al frente: "Nosotros no somos mecánicos tenemos conocimientos básicos pero poco más así que nos hemos descargado el manual de instrucciones y estamos intentando tirar con ello", asevera Julen. Un manual que, además, está escrito en alemán, un idioma totalmente desconocido para el equipo que intentan descifrar con ayuda de traductores.

Y los frutos de este laborioso trabajo ya se han empezado a reflejar en uno de los camiones, en el matriculado en 1969, por el que empezaron hace un año. "Nos costó varios meses lograr que el camión arrancara, pero el día que lo hizo... no sé puede ni explicar la emoción que nos dio", recuerda Egoitz, otro de los bomberos. Por el momento, y tras 15 años parado, los bomberos ya han logrado poner en marcha el camión. Su ilusión era poder tenerlo listo para la Cabalgata de Reyes aunque este año no ha podido ser, porque aunque funciona, no han llegado a tiempo para pasar la ITV.

En estas labores también se han involucrado e interesado compañeros jubilados porque, según explican, "no sabíamos ni cuál era el botón de arranque" y ya han logrado cambiarle el sistema de frenos al igual que han revisado el combustible, la bomba inyectora, los filtros... No obstante, y aunque ya lograron que pasara la ITV, que llevaba obsoleta desde el 2004, estos bomberos confiesan que todavía les queda mucho trabajo por hacer: "Tenemos que pintarlo, cambiar las gomas. Sin exagerar, tal vez nos quede un año de trabajo por delante hasta lograr ponerlo del todo bonito", asegura.

Cuando terminen de reparar el primer camión, llegará el turno del más histórico, también del más complicado. "No sabemos ni lo que nos vamos a encontrar cuando nos pongamos manos a la obra con el de 1927", dice Egoitz. Lo que sí tienen claro es que harán un pequeño descanso para retomar con fuerzas. De hecho, los compañeros confiesan que el valor histórico de este camión es incalculable, según detalla Dioni, uno de los bomberos más veteranos próximo a su jubilación, este camión fue utilizado incluso en varios rodajes como el de Gernika, "no en la película de hace dos años, pero sí anteriores a esa".