MAGNIFICAR la obra civil de las ciudades buscando más el efecto visual que el práctico no ha sido siempre una buena idea. Algunas construcciones han abierto debates muy duros sobre lo que debe imperar en la arquitectura, lo funcional o lo artístico. Quizá el equilibrio entre ambas concepciones era lo más adecuado, pero muchas veces se ha impuesto el genio creativo de los arquitectos e ingenieros y los ciudadanos han pagado las consecuencias.

Hay proyectos de ingeniería, obras o edificios cuya espectacularidad, por desgracia, está a la altura de los errores que se cometieron en su diseño y en su posterior construcción. Con la ayuda de un amplio grupo de expertos, equipos de diseñadores y testigos el nuevo programa de DMAX, Grandes errores de la ingeniería repasará todos los viernes a las 18.40 horas a partir de mañana cuáles fueron los principales fallos que se cometieron, el motivo por el que no fueron detectados y cuáles son las soluciones a estas obras imperfectas que en algunos casos también han provocado desagradables accidentes.

Crucemos la ría Aunque el ser humano lleva construyendo durante más de 10.000 años todo tipo de edificios y obras de ingeniería, los errores existen. Sin embargo, algunos resultan mucho más llamativos y peligrosos cuando se producen en proyectos de gran envergadura. DMAX, canal de Veo TV del que Discovery es el principal proveedor de contenidos, destapará estos errores de altura de los que sus creadores o ingenieros apenas quieren hablar.

El primer viaje que hará el canal será a través del puente que diseñó Santiago Calatrava y que ha dado muchos disgustos administrativos. Este será el arranque de Errores de la ingeniería. Aunque es estos momentos es transitable, ha causado muchos problemas y muchos debates. En alguno de ellos se cuestionan las decisiones institucionales adoptadas y también el ego de los profesionales que lo construyeron al mando de Calatrava como jefe de este proyecto.

Todo empezó en 1997 Ese año Bilbao inauguraba el puente Zubizuri, convertido desde entonces en uno de los más famosos de la ciudad y en un auténtico símbolo de la regeneración de la urbe tras su etapa industrial. La construcción de este puente, que une el centro de la ciudad en la margen izquierda de la ría con el Campo Volantín en la derecha, fue encargada al arquitecto Santiago Calatrava que diseñó un proyecto muy llamativo y vanguardista que llegó a convertirse en un quebradero de cabeza para los usuarios.

El equipo del programa de DMAX se reunirá en Bilbao con profesionales y testigos que relatarán ante las cámaras los problemas que ha generado el puente desde su inauguración debido a un error en el que nadie reparó cuando se diseñó y se construyó. El problema de esta obra radica en que el material de su suelo fue realizado íntegramente con baldosas de cristal, una superficie muy resbaladiza con la lluvia, condición atmosférica muy frecuente en Bilbao. Las constantes quejas de los usuarios por las caídas producidas en el puente Zubizuri llevaron al Ayuntamiento a buscar una solución: cubrir el puente con una alfombra negra antideslizante que evitase los resbalones.

Grandes errores de la ingeniería también recalará en otras ciudades para conocer de cerca la historia de la estación ferroviaria abandonada de Canfranc y cruzará el charco hasta Baltimore para buscar los motivos por los cuales una de las calles de esta ciudad se hundió tras unas fuertes lluvias tragándose una hilera de vehículos que estaban aparcados y que se depositaron en las propias vías del ferrocarril. La Torre de Pisa, los defectos en la construcción de diversos rascacielos en Manhattan o San Francisco, el peligro de inundación de una construcción religiosa en Venecia o una catedral a punto de derrumbarse serán otros de los casos que analizará el nuevo programa.