Los Bomberos de Bizkaia han vuelto a demostrar su compromiso no solo con las personas, sino también con los animales. Este domingo, efectivos del cuerpo han rescatado a un caballo que había quedado atrapado en un paso canadiense en la zona de La Arboleda. El animal, que tenía una pata encajada entre las barras metálicas de esta estructura de seguridad, fue liberado tras una intervención delicada en la que fue necesario utilizar una rotaflex para cortar el hierro y liberar la extremidad.

Cada año, los bomberos vizcainos atienden varios rescates de grandes animales en situación de riesgo, especialmente en entornos rurales o montañosos donde el acceso es complicado. Estos operativos requieren no solo habilidad técnica, sino también una cuidadosa valoración del estado del animal y del entorno para garantizar una intervención segura y eficaz.

Otros rescates

Hace solo unas semanas, otro rescate conmovió a la ciudadanía: un perro fue salvado en Amorebieta tras quedar atrapado en el interior de una tubería. El bombero Etor se introdujo más de 40 metros con un arnés dentro del estrecho conducto para alcanzar al animal, que no podía colaborar debido al agotamiento. Tras varios intentos, el perro fue finalmente liberado en buen estado.

Estos casos ponen de relieve la dedicación de los equipos de emergencia ante situaciones que, aunque no afectan directamente a personas, sí comprometen la vida de otros seres vivos. Rescates en montes, agujeros, ríos o estructuras industriales forman parte de una lista de intervenciones que exigen preparación, coordinación y una gran sensibilidad.