Alrededor del 40 por ciento de las mujeres padece incontinencia urinaria en el Estado español y, al contrario de lo que se piensa también hay jóvenes; este trastorno afecta a una de cada cuatro mujeres a partir de los 35 años.

La incontinencia urinaria sigue siendo un tema tabú, a pesar de que es uno de los problemas que mayor impacto produce en la calidad de vida. Según un estudio, los pacientes tardaban una media de tres años en consultar con un especialista el problema. ¿La razón? Por vergüenza, por pensar que no tiene tratamiento o creer que es algo normal con la edad o después de haber tenido hijos.

Algunas enfermedades que afectan al sistema nervioso, como la esclerosis múltiple, también pueden provocar este tipo de incontinencia. En el caso de los hombres, un agrandamiento de próstata también puede ser la culpable.

El suelo pélvico

Este conjunto de músculos y ligamientos que rodean la cavidad abdominal en su parte inferior tienen como función sostener el útero, la vejiga y el recto. Pero el envejecimiento y también la falta de ejercicio, o lo contrario también con deportes de impacto como saltar o levantar mucho peso, pueden debilitarlos.

La buena noticia, según los especialistas, es que puede ejercitarse y evitar problemas que van desde la incontinencia al dolor durante las relaciones sexuales o el estreñimiento

Consejos para ejercitarlo

Ejercicios de Kegel. El método más común para fortalecer el suelo pélvico. Consisten en apretar los músculos del piso pélvico durante varios segundos para después relajarlos. Cerciórese de que la vejiga esté vacía.

Hipopresivos. Tras el parto y en la menopausia, estos ejercicios sirven para prevenir la falta de tono de la zona.

Respiración. Hacer inspiraciones y espiraciones largas y profundas, así como evitar respiraciones agitadas puede tener un efecto beneficioso.

Vida sana. Llevar un estilo de vida sano y evitar el sobrepeso, que incrementa la presión abdominal y favorece la debilidad de los tejidos de sostén en la vejiga, son importantes también.

Te puede interesar:

Hidratación. Para realizar sus funciones, los músculos precisan estar bien hidratados. Aunque es mejor evitar beber 2-4 horas antes de ir a dormir y no tomar estimulantes como cafeína, alcohol o bebidas energéticas.

Más fibra. Ayuda a combatir el estreñimiento que puede desembocar en un debilitamiento del suelo pélvico.