Situada al norte de la provincia de Castellón, en la Comunidad Valenciana, Morella forma parte de la red Los pueblos más bonitos de España desde 2013. Edificada sobre un peñón, acogió a diferentes civilizaciones y se ha convertido en destino turístico habitual para mucha gente atraída por su rico patrimonio arquitectónico y cultural.
Íberos, celtas, griegos, romanos, cartagineses y árabes escogieron Morella, capital de Els Ports, como destino para sus aventuras de conquista. Si la visitas, lo entenderás. Considerado uno de los pueblos más bellos del Estado, es una joya medieval abrazada por una muralla que esconde, en su interior, fantásticos lugares que atrapan al turista.
Morella es un pueblo por el que han pasado muchas civilizaciones que han dejado su impronta en sus calles, casas, rincones y en su rico patrimonio, repleto de historia y arte. La colina que dibuja el horizonte de este destino acoge uno de los monumentos más importantes de su historia: un castillo que domina sobre un océano de montañas.
Su ubicación privilegiada ha hecho de la fortaleza un sitio inexpugnable en el paso natural del interior a la costa. Además, incluye restos del Neolítico y de las Edades de Bronce y de Hierro. Visita obligada, es un placer para los sentidos, sobre todo para la vista debido a las extraordinarias panorámicas que cobran vida bajo sus pies.
El recorrido debe incluir también el Palacio del Gobernador, que resulta sorprendente al estar construido en el interior de una cueva y ser capaz de llevarte a los tiempos más prolíficos del Neolítico. El paseo debe continuar en otro de los impresionantes templos locales, la Basílica Arciprestal de Santa María la Mayor, joya del gótico religioso construida entre los siglos XIII y XIV, y que rebosa arte en su fachada y en su interior.
Torres y gastronomía
La ruta puede incluir también el convento de San Francisco, pero lo obligado es un paseo por sus calles repletas de encanto, especialmente en su casco antiguo. Allí descubrirás rincones como la calle Blasco de Alagón, donde se encuentra el Ayuntamiento, o el barrio de la Judería. Y te verás rodeado de 16 torres vigía que regalan magníficas vistas, entre ellas las de San Miguel.
Quien disponga de tiempo puede disfrutar también de los Museos de Los Dinosaurios y de Sis en Sis, o de la prisión local. Y no muy lejos, a unos seis kilómetros, están las pinturas rupestres de Morella la Vella. Y para reponer fuerzas pide los exquisitos flaons, su reputada cecina o las múltiples variantes de sus quesos.
