La Justicia francesa dio este miércoles su visto bueno para que la española juzgue a la exjefa de ETA María Soledad Iparraguirre, 'Anboto', por el atentado contra la casa cuartel de la Guardia Civil de Santa Pola (Alicante) en agosto de 2002, en el que dos personas fueron asesinadas.

La sala de instrucción del Tribunal de Apelación de París autorizó una extensión a este caso de la entrega que ya se había concedido para que se sentara en el banquillo por otros hechos diferentes, en respuesta a una euroorden española emitida en octubre de 2023.

La Audiencia Nacional de Madrid la reclama para juzgarla por su responsabilidad como miembro de la cúpula dirigente de ETA en el momento de los hechos, no como autora material del atentado del 4 de agosto de 2002 en el que murieron un hombre que se encontraba en las proximidades de la casa cuartel de Santa Pola cuando estalló un coche bomba y la hija de 6 años de un agente de la Guardia Civil.

Por eso ya fueron sentenciados en 2012 los etarras Oscar Zelarain y Andoni Otegi a un total de 843 años de prisión.

'Anboto' está imputada en esta causa por los delitos de asesinatos terroristas, tentativas de asesinato y estragos terroristas.

Las penas máximas a las que se expone en caso de que se la declare culpable es de 30 años de cárcel por cada uno de los dos asesinatos, 20 por cada uno de los 55 heridos y 20 años por los estragos terroristas.

Como fue capturada en el Estado francés, en aplicación del llamado principio de especialidad, las autoridades españolas deben solicitar una autorización de entrega cada vez que la quiere sentar en el banquillo por una nueva causa.

Iparraguirre ha sido ya condenada en el Estado español a cientos de años de cárcel por diversos hechos, que se suman a las seis condenas que se le han impuesto en territorio galo, la mayor a 20 años de prisión.