Carlos Alcaraz se impuso por primera vez en el Masters 1000 de Montecarlo y recuperó el número 2 del mundo tras derrotar a Lorenzo Mussetti por 3-6, 6-1 y 6-0. Además, el murciano pasa a encabezar la clasificación anual con su segundo título del año tras el que logró en febrero en el ATP 500 de Rotterdam. Sumar este triunfo debe servir para que Alcaraz recupere las mejores sensaciones tras una floja gira americana de pista dura.

En la final, su juego volvió a sufrir altos y bajos, sobre todo en un primer set que casi regaló al italiano con una docena de errores no forzados y demasiadas prisas por resolver los puntos. En la tierra batida, es fundamental tener paciencia y es lo que hizo a partir del segundo set, sin abandonar algunos toques de genialidad. Alargar los puntos permitió que afloraran los problemas físicos de Mussetti, que se vio impedido por unas molestias en el psoas y no pudo dar más batalla.

La gira de tierra ha empezado bien y ahora Alcaraz, que cerca de cumplir 22 años tiene en su poder cuatro Grand Slams y seis Masters 1000, quiere encontrar una estabilidad en el rendimiento. “Gane o pierda, tengo que salir feliz de la pista. Tengo que estar orgulloso de lo que he hecho. Eso es algo que he aprendido y que se ha visto esta semana. Intentaré ir con el mismo enfoque que en este torneo”, afirmó el de El Palmar, que esta semana se enfrenta al Barcelona Open como primer favorito.