El autor alerta sobre los impactos del cambio climático en la península ibérica, especialmente las olas de calor y su creciente mortalidad. Señala la urgencia de combinar mitigación y adaptación, apostando por soluciones basadas en la naturaleza como el arbolado urbano. Subraya la necesidad de políticas urbanísticas justas, inclusivas y sostenibles ante una crisis climática cada vez más tangible