Por fin, se acaba el Mundial. Probablemente estaréis disfrutando a tope con el Mundial y para vosotros/as sea una gozada cada partido que veis. De inicio era extraordinario que se celebrase en estas fechas y una vez pasado, ojalá sea la última. El Mundial debe celebrarse en verano y punto. Opinión personal, por supuesto, parar las ligas ha sido un destrozo y para los clubes, independientemente del dinero que perciben por los jugadores prestados, un estropicio y una ruptura de ritmo no habitual, veremos cómo incide en el desarrollo posterior.

En clave casera, habrá que ver cómo le ha afectado al Athletic este parón y a sus jugadores. En principio no debería suponer una afección grande, qué va. Es más, uno ve los amistosos disputados y entiende que los que no han acudido a Catar están como motos y a la espera de los que han llegado de allí, podría repetirse un reinicio de campeonato similar al vivido, con la excepción de que los rivales van a ser más complicados y vas a jugar menos partidos como local.

Siento felicidad por la vuelta a los partidos de verdad y el regreso de los aficionados a los estadios con sus camisetas habituales, bufandas y todo lo que envuelve a la competición oficial. Liga y Copa con más ilusión que nunca. Nos hemos vuelto a dar cuenta de la importancia que tiene el equipo rojiblanco en nuestro día a día. Los lunes no son lo mismo si durante el fin de semana no ha jugado el Athletic. Bueno, es verdad que ahora hasta los martes pueden ser ‘lunes’, pero a los efectos es igual.

Las Llanas recibirá a los de Valverde con el cartel de ‘no hay billetes’ y con la ilusión de eliminar a un grande. La calidad debería imponerse y en eso los leones son muy superiores. Meritorios contra favoritos en la primera batalla en el torneo del K.O. tras la cita mundialista. Que empiece la fiesta.