Dublín, la capital verde y lluviosa de la República de Irlanda, es un atractivo destino turístico y cultural. Se trata de una de las ciudades europeas con más vida y ambiente y eso se debe principalmente a su población: es la más joven de Europa, ya que un 50% de sus habitantes tiene menos de 25 años. Conocida como la ciudad de los grandes poetas, debido a que ilustres escritores como James Joyce, Samuel Beckett y Oscar Wilde son originarios de ella, presenta una amplia oferta de librerías, teatros y museos.

Dublín es la cuna de la inconfundible cerveza Guinness y a ella le debe su fama mundial.

Pasear tranquilamente por las calles de Dublín, contemplar sus bellos edificios históricos, disfrutar de sus gentes y degustar una buena pinta son algunas citas obligadas para todo aquel que visite esta ciudad situada cerca de la costa este de Irlanda. Precisamente, Dublín es la cuna de la cerveza Guinness y a ella le debe su fama mundial. Nacida en esta ciudad en 1759 a manos de Arthur Guinness, la Stout, conocida en Irlanda como cerveza negra o Dark Beer, es hoy la cerveza más famosa del mundo, una de las más consumidas en todo el planeta y todo un símbolo del pueblo irlandés.

Cerveza negra con una vista de Dublín al fondo.

Cerveza negra con una vista de Dublín al fondo. IN

El proceso de elaboración de esta icónica cerveza irlandesa es similar al del resto de cervezas y consta de cinco etapas: macerado, cocción, enfriamiento, fermentación y envasado. Frente a la cerveza tostada Ale y a la rubia Lager, la cerveza negra de tipo Stout tiene dos peculiaridades: está también compuesta por malta, pero en su caso ha sido previamente tostada para darle ese toque cafetero, y además, el gas que lleva disuelto no solo está compuesto de dióxido de carbono como en el resto de cervezas, sino que tiene un 80% de nitrógeno, lo que le aporta ese cuerpo denso y cremoso.

Conocida como la ciudad de los mil pubs, ‘The Temple’, en pleno centro, es el más famoso de la localidad.

Aunque solo se conserven en la isla 12 fábricas de Stout frente a las más de 200 que había en el siglo XIX, Irlanda es hoy la mayor productora de cerveza negra del mundo. La cervecera más antigua del país es St Francis Abbey, una abadía franciscana medieval ubicada en la localidad de Kilkenny y en la que los monjes ya elaboraban cerveza en el siglo XIV.

Catedral de San Patricio. Freepik

La cerveza Guinness debe servirse fresca, pero no demasiado fría. Debido al nitrógeno que lleva, ha de dejarse reposar tras su vertido entre 1 minuto y minuto y medio, antes de que ese gas desaparezca del todo. La Guinness de barril se debe servir a 6 ºC, mientras que la extrafría a 3,5ºC. La medida normal suele ser la pinta (568 mililitros) y si quieres la mitad debes pedir un glass (284 ml).

Dublín debe su nombre al asentamiento vikingo ‘Dubh Linn’, cuyo significado es ‘pozo negro’.

El lugar ideal para degustarla, a un precio que puede rondar los 6 euros (Dublín es la quinta ciudad más cara de Europa), es uno de los pubs irlandeses (Irish pub) que abundan en el país, muchos de ellos con música en directo. En el siglo XVII había 1.180 pubs en Dublín y en los años 90 este modelo se exportó al resto del mundo alcanzándose la cifra de 7.000 pubs irlandeses en un total de 54 países.

Sala principal de la biblioteca del Trinity College. Wikipedia

¡Una advertencia!: si vas a pedir dos pintas, no lo hagas con el símbolo de la victoria (V) enseñando las uñas porque es un símbolo muy mal visto en Irlanda, algo parecido a lo que ocurre en España cuando levantas el dedo corazón. Para que nadie se ofenda, debes hacer siempre ese gesto con las uñas hacia ti.

La ciudad de los mil pubs

Si algo no falta en la capital irlandesa, conocida como la ciudad de los mil pubs, son locales para degustar una buena cerveza. Algunos de ellos son:

  1. The Temple Bar. Situado en pleno centro cultural, es el pub más famoso de la ciudad. 
  2. The Oliver St. John Gogarty. Ofrece una amplia variedad de cervezas.
  3. The Porterhouse. Produce su propia cerveza y en él no encontrarás ni una gota de Guinness ni de ninguna otra cerveza industrial. Es un local de tres pisos y sus paredes están llenas de botellas de cerveza.
  4. The Brazen Head. Es el pub más antiguo de Dublín y data del año 1198.
  5. The Church. Es una antigua iglesia con su coro, su órgano, sus vidrieras y el resto de elementos propios de una iglesia.
  6. Mcdaid’s. Es de los pubs donde mejor se tira la Guinness.
  7. Gravity Bar. Moderno bar con forma de platillo volante que forma parte de la fábrica de Guinness, donde se elabora esta cerveza, la más conocida del mundo, desde 1759. El local, en el último piso de la fábrica, ofrece unas espectaculares vistas de Dublín.


Las mejores cervezas

Entre las auténticas cervezas irlandesas que podemos degustar en Dublín destacan:

  • Murphy’s. Es la Stout más conocida en Irlanda después de la Guinness y el orgullo de los habitantes de Cork, donde se fabrica. 
  • Smithwick’s. Es la más popular del tipo Ale y se produce en Killkeny. Fue adquirida por Guinness y es la segunda cerveza más consumida en Irlanda.
  • Killkeny. Tipo Ale, era la más popular en los años 90 hasta ser superada por la anterior.
  • O’Hara’s. Cerveza artesanal de referencia con 20 años de vida que se fabrica en Carlow y que se presenta en sus variedades rubia, tostada y negra.
  • Hilden. Cerveza artesanal fabricada en Belfast. Es del tipo Lager.
  • The Porterhouse. Cerveza negra que se produce en una pequeña fábrica con solo 12 empleados y se distribuye solo a seis pubs: 4 en Irlanda (Dublín y Brey), y dos fuera en Londres y Nueva York. La Plain Porter y su Oyster Stout -hecha con ostras- son las más populares de las que se producen.
  • Cerveza verde. Muy popular en el día de San Patricio, fue creada en 1914 por el doctor irlando-estadounidense Thomas Hayes Curtin. Para su receta inicial, agregó a la cerveza una gota de un tipo de blanqueador azul con lo que obtuvo la bebida verde. Actualmente se utilizan colorantes alimenticios que no alteran el sabor de la cerveza.


Lugares para perderse en Dublín

Pero Dublín es mucho más que su cerveza, es una de las ciudades más acogedoras de Europa. Fundada por los vikingos, su asentamiento dio lugar a la ciudad de Dubh Linn, cuyo significado es pozo negro en lengua gaélica. Se dice que el pozo está situado junto al castillo de Dublín.

Dividida en dos por el río Liffey, destaca por su centro histórico repleto de antiguas iglesias, monumentos históricos, interesantes museos, parques, rincones y bulliciosas calles que no puedes dejar de visitar. 

A continuación te proponemos algunos de ellos:

  • Trinity College. Es la universidad más antigua de Irlanda y una de las más prestigiosas del mundo. Se dice que la larga sala principal de su biblioteca inspiró el colegio de Howarts de Harry Potter.
  • Grafton Street. Famosa calle peatonal situada en pleno centro en el Parque de Saint Stephen’s Green y Trinity College. Muy concurrida, es perfecta para ir de compras y para escuchar buenos músicos callejeros.
  • Parque de Saint Stephen’s Green. Parque perfecto para desconectar del ajetreo de la ciudad o para hacer un picnic.
  • Phoenix Park. Con 700 hectáreas verdes, es el parque más grande de Europa para disfrutar de la naturaleza en pleno centro de la ciudad. Una d esus peculiaridades es que casi podría ser un bosque, ya que en su interior viven ciervos en libertad.
  • Merrion Square. Antiguo parque privado rodeado de elegantes edificios de estilo georgiano. En él se puede contemplar una estatua de Oscar Wilde o un antiguo refugio antiaéreo de la II Guerra Mundial.
  • Catedral de San Patricio. Es la iglesia más grande del país dedicada al patrón de Irlanda. Fue reformada en 1260 y en ella se puede contemplar la cripta, la pila bautismal, el coro, la ‘Puerta del capítulo’ y el sepulcro de Jonathan Swift, autor de ‘Los viajes de Gulliver’.
  • Castillo de Dublín. Situado en el centro histórico, es un emblema del país y ha sido residencia real, fortaleza militar y sede del Tribunal de Justicia Irlandés. 
  • Catedral Christ Church. Catedral protestante construida en 1028 por un rey vikingo y ampliada a lo largo de los siglos.
  • Ayuntamiento. Situado cerca de Christ Church, puedes observar en él la Rotonda, una amplia sala circular culminada con una impresionante cúpula sostenida por doce columnas y decorada con elegantes estatuas.
  • Río Liffey. Si cruzas el puente peatonal Ha’penny Bridge (Puente del Medio Penique) y elMillenium Bridge al anochecer obtendrás una de las mejores estampas de Dublín.
  • O’Connell Street. Es la principal arteria comercial, una de las más anchas de Europa. En ella se puede contemplar el Spire (Monumento de la luz), una aguja de acero de 120 metros de altura que conmemoró la llegada del nuevo milenio.
  • Guinness Storehouse. Es la fábrica y almacén de la cerveza Guinness. Convertida en museo, esta antigua fábrica es un templo para los amantes de la cerveza. El edificio tiene 7 plantas y en la última de ellas está el Gravity Bar, con unas vistas espectaculares de Dublín.
  • Pastelería Queens of Tarts. Si lo tuyo son los dulces, no puedes dejar de visitar esta pastelería, la “reina de las tartas”, como dice su nombre. Un excelente lugar para merendar, desayunar o simplemente darse un dulce homenaje.