Dicen que las comparaciones son odiosas, pero no por ello ofrecen su punto de referencia. El Arenas puede dar fe de ello. El conjunto rojinegro las pasó canutas el curso pasado debido, entre otras causas, a sus nefastos números en Gobela, que tradicionalmente se había convertido en un fortín y en una mina de sacar puntos. No en vano, el Histórico tuvo que esperar a la décimo primera comparecencia en su guarida, ya en la segunda vuelta, para conocer su primer triunfo casero, entonces ante el Náxara (4-0), después de encajar seis derrotas y firmar cuatro empates, lo que supuso un lastre para sus intereses a lo largo de toda la competición. En el presente ejercicio, el nuevo Arenas ha rentabilizado Gobela a las primeras de cambio, ya que el pasado sábado se apropió de los tres puntos en el estreno ante el afición con una solvente victoria sobre el Calahorra que, además, permitió al cuadro getxotarra olvidar el duro varapalo padecido en el feudo del Utebo en la jornada inaugural del grupo II de Segunda RFEF.
El nuevo Arenas asoma el sello de su entrenador. Ibai Gómez, exjugador del Athletic y que afronta su primera experiencia en un banquillo senior, se autocalifica como un entrenador “perfeccionista”, una genética que quiere transmitir a su equipo, que poco a poco va asimilando los conceptos que prioriza el de Santutxu, del que se conoce que es amigo del buen trato del balón y muy metódico en sus matices futbolísticos, hasta el punto de que no acepta desconexiones de sus jugadores durante los partidos, como ocurrió en el tramo final del duelo ante el Calahorra, que generó que los rojinegros dieran un paso hacia atrás, aunque lograran mantener la puerta a cero, que “es importantísimo”. “Yo soy bastante perfeccionista, no me gusta dejar las cosas al azar y los últimos diez minutos nos ha costado un poco más. Sin embargo, hemos sabido sufrir, que también es importante”, expresó Ibai Gómez, quien, así y todo, alabó el trabajo de su colectivo, que, en su opinión, “en un 80 por ciento del partido ha sido espectacular”.
El Arenas sacó su mejor versión ante el conjunto calagurritano, aunque esta tampoco estuvo muy alejada de la que ofrecieron los vizcainos en Utebo, donde les afeó un pésimo tramo de diez minutos en los que el equipo aragonés anotó sus tres goles. Entonces, al cuadro rojinegro le faltó pegada, matiz que no se repitió en su estreno en Gobela, donde estuvo afortunado de cara a gol si bien le faltó más contundencia para haber sellado una victoria más holgada, realidad que destacó su entrenador. “Gran parte del partido se ha parecido al de la semana pasada, a diferencia de que hoy (por el sábado) hemos estado mucho más acertados. En la primera parte hemos merecido irnos con más ventaja aún. El resultado es lo importante, pero estoy contento porque la dinámica sigue siendo creer en la idea, insistir, hemos sabido gestionar mejor los tiempos”, valoró el de Santutxu, que se queda con las sensaciones positivas que, a su juicio, proyecta un Arenas que cree reconocible aunque se hayan consumado solo dos jornadas. “La clave era asentarnos en el segundo tiempo, gestionar bien la posesión. El 2-0 nos ha venido muy bien después de que el Calahorra apretara en el inicio del segundo tiempo. El equipo está haciendo muy bien la salida de balón, ubicándose bien, que hace más difícil jugar al rival”, sentenció.