La tecnología cuántica se basa en una rama de la física que estudia el funcionamiento de las cosas a escalas extremadamente pequeñas, como los átomos y las partículas subatómicas. Los avances en ese campo se están aplicando ya por ejemplo en el campo sanitario, donde se están diseñando tratamientos y medicinas específicas para pacientes concretos. La clave es la velocidad de análisis de los ordenadores cuánticos, que en tiempo récord pueden detectar errores y hallar la solución. En la automoción tiene protagonismo en la fabricación de baterías con más autonomía para el coche eléctrico.
En el futuro, permitirá optimizar la logística o las carteras de inversión del sector financiero y agilizar los procesos de control de calidad de la producción de las fábricas. Con todo, una de las líneas de trabajo más urgente es la ciberseguridad. Esta tecnología puede facilitar los ataques de los hackers y las compañías del sector están trabajando en diques basados también en la cuántica para proteger los equipos de las empresas y los hogares.
La diputada general de Bizkaia afirmó durante su intervención que el desarrollo de esta tecnología tiene “aplicaciones en todos los sectores” y va a suponer “cambios que no somos capaces de predecir con exactitud”. Por ello, “Biqain es la apuesta decidida por un futuro en el que Bizkaia esté en la vanguardia de la revolución cuántica. Y este futuro ya está aquí, con laboratorios de alfabetización cuántica, proyectos piloto con empresas y una apuesta clara por la formación y atracción y desarrollo de talento. Estamos construyendo las bases para que nuestra industria siga siendo competitiva y nuestras empresas, grandes y pequeñas también, puedan aprovechar las inmensas oportunidades”, manifestó.