Euskaltel ha cerrado el primer semestre del presente ejercicio, -el último como operador independiente porque pasará a fin de mes a manos de Más Móvil tras el esperado éxito de la OPA presentada por este grupo-, con unas pérdidas de 5,5 millones de euros, 3,4 millones de euros en el segundo trimestre del año y 2,1 millones de pérdidas en el primero, dato que contrasta con los 79,4 millones de beneficio neto obtenido a lo largo del pasado año.

El grupo telefónico vasco -que integra las marcas Euskaltel, R, Telecable y Virgin Telco- ha logrado crecer tanto en clientes como en ingresos en el segundo trimestre pero con ofertas muy competitivas en precios y con los gastos añadidos a la expansión, ha visto cómo sus resultados se han visto afectados.

Con todo, la compañía que dirige José Miguel García señaló ayer martes que los números del periodo abril-mayo-junio “consolidan el crecimiento en sus principales magnitudes operativas, con un fuerte aumento en la base de clientes del grupo, superando las cifras récord de los últimos trimestres, un crecimiento en ingresos del 1,5% sobre el ejercicio anterior y la vuelta al crecimiento en el resultado bruto o ebitda en el trimestre”.

La compañía telefónica vasca destacó que en el segundo trimestre habría obtenido unos beneficios de 13,3 millones de euros, sin tener en cuenta la depreciación que ha hecho en sus activos de cable que se están quedando obsoletos al apostar ahora por implantar la fibra óptica FTTH hasta el salón de casa.

El grupo vasco resalta que ha logrado, de la mano de Virgin Telco, crecer en ingresos y clientes. En concreto, Virgin Telco, la marca que el grupo Euskaltel está usando para crecer en España, en su primer año de vida ha captado 122.000 clientes, 98.000 de ellos en telefonía fija, y ha generado 15,2 millones de euros de ingresos.

Como se recordará, este viernes, 30 de julio de 2021, marcará un nuevo hito en la historia del operador vasco, ya que esa es la fecha en la que concluye el plazo para aceptar la OPA lanzada por Más Móvil para hacerse con el control de la compañía naranja. Fuentes del sector dan por hecho que la oferta será secundada por la gran mayoría de accionistas.