BILBAO - Euskaltel está ultimando un acuerdo con Virgin para utilizar la marca del operador británico en su expansión por el Estado. La compañía vasca afrontará el próximo año uno de los mayores retos: el salto al mercado español, donde se plantea "competir de tú a tú" con el resto de operadores y hacerlo además en el "cien por cien del territorio". Fuentes de Euskaltel confirmaron ayer que los contactos con Virgin están avanzados y que en breve se pondrá la última pieza que falta para iniciar el ambicioso despliegue por el Estado.

La estrecha relación del fondo de inversión Zegona con la compañía de Richard Branson, también británica, y el interés de Virgin por posicionarse en el mercado europeo han engrasado las negociaciones, que podrían llegar a buen puerto los próximos días. Tras cerrar la semana pasada el acuerdo con Orange para utilizar las redes del operador francés en el Estado, el acuerdo con Virgin despejará definitivamente el horizonte para el que es el principal objetivo del actual primer accionista de Euskatel, aumentar los ingresos de la compañía y sacar más rentabilidad a su inversión.

Se trata de una de las máximas del fondo de inversión británico, que tiene la misión de "comprar, arreglar y vender" compañías y que en lo relativo a Euskaltel ha mostrado en varias ocasiones su interés por acelerar el desembarco por el resto del Estado como vía para aumentar su valor de cara a una posterior venta.

La alianza con Virgin era un secreto a voces. El consejero delegado de Zegona, Eammon O' Hare, y su jefe de operaciones, Robert Samuelson, abandonaron en 2014 Virgin Mobile para fundar la firma que ha terminado por hacerse con el control de la teleco vasca. De modo que a medida que el fondo de inversión ha aumentado peso en la compañía vasca la posibilidad de un acuerdo ha sonado cada vez con más fuerza.

Euskaltel mantendrá su marca en Euskadi y Nafarroa, mientras que Telecable y R seguirán siendo la enseña en Asturias y Galicia, respectivamente. Sin embargo, en el resto del Estado operará bajo la bandera de Virgin, una marca conocida, aunque no tanto por su división de telefonía, lo que en teoría abaratará los costes de marketing. Fuentes de Euskaltel confirmaron ayer a DEIA que la intención es cerrar la alianza "cuanto antes", pero rechazaron fijar plazos porque, entre otras cuestiones, el acuerdo deberá ser refrendado por el consejo de administración. Tampoco se ha puesto fecha al despliegue por el Estado, que se iniciará en el momento en el que la maquinaria esté bien engrasada.

Mercado objetivo

Lo que sí se sabe es que el salto al conjunto del Estado se producirá el próximo año y que el mercado objetivo al que se intentará llegar está compuesto por los 14 millones de hogares a los que llega la red de Orange. El plan estratégico de Euskaltel se ha marcado como reto conseguir 90.000 nuevos clientes en el horizonte de 2022.

En una primera fase de la Expansión, la compañía vasca se centrará en la comercialización de las ofertas convergentes de Euskaltel -telefonía, Internet y televisión- a través de la red de fibra Orange.

El acuerdo con el operador francés, renovado y mejorado para los intereses de la compañía vasca la semana pasada, tiene un coste variable ligado al uso de la red. Es decir, pagará en función de los clientes que capte. Se minimizan los riesgos que supondría un peaje líneal, a cambio de lograr menos beneficios por cada nuevo contrato que se firme.

Por otra parte, desde la compañía que dirige José Miguel García se aclaró, como ya hizo la semana pasada el propio consejero delegado que no hay ninguna previsión de venta de la red de fibra del grupo en Euskadi. El objetivo es alcanzar acuerdos con otros operadores y alquilarles la infraestructura. Sería en cualquier caso una posibilidad que se exploraría en un escenario posterior al despliegue por el Estado, por lo que cualquier decisión al respecto -no se descarta crear una sociedad paralela que gestione la red de fibra- se tomaría en un plazo de dos o tres años.

El objetivo inmediato es subir a la primera división de las telecomunicaciones y la única forma es estar en todo el mercado estatal. De hecho, Euskaltel ya ha dado los primeros pasos con su expansión en Navarra, León, Cantabria, La Rioja y Catalunya y en enero de este mismo año anunciaba su intención de llegar este año a más de un millón de nuevos hogares en estas zonas. El grupo se muestra confiado en su estrategia de expansión tras el éxito logrado en sus territorios que son los "de los más exigentes" a nivel de competencia y con unos clientes también muy exigentes.

Acuerdo con Telefónica

El Grupo Euskaltel anunció ayer asimismo la renovación del acuerdo mayorista que habilita a Telecable la prestación de servicios móviles a sus clientes de Asturias sobre la red de Telefónica El acuerdo permitirá al operador asturiano seguir ofreciendo a sus clientes "los servicios y productos de telecomunicaciones más avanzados". Euskaltel subrayó que el acuerdo es "beneficioso para ambas partes", refuerza los compromisos que ya incluía y permite a Telecable acceder a las tecnologías actuales, manteniendo la estructura del acuerdo original e incluyendo mejoras en condiciones determinadas.