NO es sencillo hacer un cambio drástico después de haberlo ganado todo. Estar en la cima y apostar por una incógnita. El proyecto de Santurtzi tenía una base muy optimista y había lanzado un guante a todos sus rivales. Quería crecer y aspirar a todo. Pero al mismo tiempo era una aventura desconocida, una tripulación compuesta por buenos nombres aunque sin nada demostrado al inicio de este curso. Andoni García (Portugalete, 1985) se encontró con esta disyuntiva. Mantenerse en el equipo más regular de las últimas temporadas o querer formar parte de la revolución. Fue una decisión fácil. Bermeo le dio mucho pero enfrente estaba el club de su vida, donde comenzó a remar y creció como deportista. García volvió a casa y las cosas no pudieron ir mejor. Fue importante desde la primera regata y la Sotera confirmó su potencial, ganando una bandera y mostrándose como una trainera complicadísima de batir.

La Sotera siempre será especial para García. Ese sentimiento creado en sus primeros años como remero hicieron que dejar Urdaibai fuera un poco más sencillo. “Soy de Portu pero vivo en Santurtzi y empecé a remar aquí. Siempre he remado aquí y me siento de Santurtzi. Está claro que este es el club de mi vida y con este serán doce años, claro que es un club que siento”, declara García. Pero no solo el corazón pidió volver, también la cabeza fue fría y los factores extradeportivos tuvieron un gran peso: “El trabajo y la familia, que he sido aita hace poco, influyeron. Decidí venir a Santurtzi porque estaban con ganas de hacer un proyecto bonito y el club está a dos minutos de mi casa. Eran todo facilidades”.

Los resultados son sinónimo de decisión acertada o errónea. Ese baremo no siempre del todo realista que divide muchas veces la felicidad de la tristeza. Santurtzi está en un buen lugar en la clasificación y García es uno de los habituales en su trece. Por ello, a la hora de mirar atrás no hay ningún mal sabor de boca. “No me arrepiento”, afirma. Este buen inicio tampoco borra de un plumazo lo vivido en Bermeo. Urdaibai fue una gran experiencia y no duda en reconocerlo: “Estoy muy agradecido a Bermeo. Estaba muy bien y guardo muchas amistades. Además ganamos dos ligas”.

Urdaibai fue una época ligada al éxito para García. Estuvo en la pelea por todos los títulos del año, amasó banderas y a su palmarés sumó dos Coronas. Números estratosféricos a los que les faltaba algo. “Siempre quieres algo más, que puedes remar algo más de lo que remas. En eso no puedes entrar ya que es decisión del entrenador. Iker contaba conmigo y ese aliciente también me empujó a volver al pueblo”, reconoce. García no estuvo en el ostracismo, pero tampoco fue un titular indiscutible, a pesar de eso siempre fue consciente de su potencial: “No perdí la confianza en ningún momento y cuando salía anduvimos bien también. Estaba muy complicado entrar porque me peleaba con gente como Colunga, Chila, Gentza? Gente muy fuerte y muy buena”.

ROL IMPORTANTE Aunque fue a Santurtzi y su papel cambió drásticamente. El ex de Urdaibai lo rema prácticamente todo. “Sabía que en Santurtzi iba a tener sitio si seguía entrenando como lo he estado haciendo toda mi vida”, afirma. El bogador de Portugalete llegó con dos ligas en su palmarés y una trayectoria reciente llena de brillo. Un pasado que podría haberle hecho acomodarse, pero tenía claro que si eso ocurría no iba a tardar en salir de la trainera. “Aquí hay que ganárselo desde el primer día que bajas a entrenar. Con el nombre solo no se rema”, declara. Hasta la fecha, García ha remado un total de siete regatas, perdiéndose solo una, y esta a dos pruebas de igualar las disputadas el curso pasado con Urdaibai.

García solo estuvo cuatro años fuera de Santurtzi. Dos en Portugalete, “donde se portaron muy bien conmigo”, reconoce; y otros dos en Urdaibai. A la vuelta a casa, el canterano de la Sotera se encontró con un club diferente al que dejó en su día. “Me fui porque había una dejadez por muchas partes del club. Necesitaba cambiar de aires o tomarme un respiro. Así que si quería seguir remando tenía que salir del club”, recuerda. Fue una decisión dolorosa, casi inevitable, y que le sirvió para curtirse fuera de casa. Con la experiencia ganada, ve el club de otra manera. “En once años que estuve pasaron muchas directivas y muchos remeros, pero en estos años se ve que ha habido un cambio con la llegada de Iker Zabala y ahora de Julio como presidente. Si se quería optar a algo, había que dar un golpe encima de la mesa e Iker lo dio”, comenta. Esa nueva ambición ganada en el club también es parte de García, que aspira a lograr grandes metas este curso: “Creo que somos candidatos a todo”.

LA JORNADA Santurtzi será uno de los candidatos a la victoria en la regata de hoy de Orio (18.00 horas). La Sotera quiere recuperarse del varapalo sufrido en el Campeonato de Bizkaia y desea ganar en la casa del líder. Mientras, mañana las embarcaciones pelearán en el siempre complicado campo de regatas de Portugalete.

Asimismo, la Liga ETE se traslada hoy hasta aguas de Sestao a las 11.00 horas para disputar su segunda jornada consecutiva en la ría, aunque en esta ocasión con la salida situada en La Benedicta y la prueba se disputará a tres calles y con dos largos. Por su parte, la ARC-1 celebrará su regata en Pedreña.