ON Santacana (1-XI-1980, Donostia) es el deportista más laureado del olimpismo español. Atesora nueve medallas en los Juegos Paralímpicos de Invierno. Además, adereza su palmarés con diecisiete preseas obtenidas en los Campeonatos del Mundo de Esquí Alpino Adaptado. Su historia de deslizamiento sobre la nieve le ha obligado a protagonizar casi una vida entera desde el aislamiento que requiere una actividad como la que tanto éxito le ha reportado. Ahora, ese confinamiento entre paredes es obligado por las circunstancias que azotan al planeta. Desde su hogar en Barcelona, lejos de su familia, que reside en Getxo, adonde pretendía viajar pero se lo impidió la pandemia de coronavirus, trata de mantenerse en forma desde la soledad para contemplar la posibilidad de seguir compitiendo.

Y es que Santacana permanece inmerso en el proceso de toma de una de las decisiones más importantes de su vida: seguir compitiendo o colgar los esquís. Estas dudas asaltaron cuando su guía, Miguel Galindo, se vio abocado a dejar el deporte por múltiples problemas de rodilla. Tras 17 años compitiendo juntos, Santacana, cuya discapacidad es visual, se quedó solo, sin los ojos que le abren el camino hacia el éxito, lo que, acompañado de diferentes cambios estructurales en la Federación Española de Deportes de Invierno, le llevó a la incertidumbre sobre su devenir en el esquí. Si bien, aún no ha decidido retirarse y por ello, estos días trata de mantenerse en forma lejos de las pistas de esquí. “Aunque a nivel de competición estoy en un momento de stand by, trato de seguir en forma por si decido seguir compitiendo”, explica.

Santacana se encuentra en un periodo de reflexión, pero a lo largo de la conversación evoca constantemente a todos esos deportistas que han permanecido en vilo con el concurso en los Juegos Olímpicos, que finalmente quedan pospuestos a 2021. “Está claro que la situación condiciona. Sigo por las redes sociales a muchos deportistas que se han estado preparando. Condiciona muchísimo, porque estaban fuera de la zona de entrenamiento, sin material y sin las personas que conforman el entorno y colaboran en la preparación”, comenta. De modo que la decisión adoptada es lo justo para competir en igualdad de condiciones y ofrecer además el mayor espectáculo posible, anteponiendo, por supuesto, la garantía de la seguridad de los implicados, razón del aplazamiento.

“En mi caso, tengo la suerte de tener un pequeño espacio que es la terraza y poseo material, que es funcional y no tiene nada que ver con prepararte practicando tu especialidad, pero que al menos permite realizar ejercicios para mantener la forma”, relata. “Trabajo con gomas, hago coordinación, fitball, TRX, peso con mancuernas...”, concreta. “Lo bueno para los deportistas es que conocen sus cuerpos, las rutinas y lo que tienen que hacer, y además cuentas con asesoramiento personal a distancia. Están limitados, unos más que otros en función de sus deportes, pero se puede trabajar por seguir en forma. Se puede realizar esfuerzo”, añade, optimista como es el laureado esquiador.

El donostiarra concede trascendencia al apartado mental, sometido a prueba en los tiempos que corren por la prohibición de salir a la calle. “Los esquiadores estamos acostumbrados a un estilo de vida más aislado, sin poder ir a los sitios, sin nada que tomar con los amigos porque no hay amigos en las zonas remotas. Pienso que en estos momentos, salvando las diferencias, se puede aprovechar para dedicar tiempo a uno mismo; ahora hay personas que disponen de un tiempo que no suelen tener. Se puede aprovechar para estar más tranquilo, meditar o retomar proyectos aparcados o que no se han podido realizar”, apunta. La premisa: exprimir el tiempo.

Santacana aboga particularmente por la formación. “Hay una explosión con el tema de la formación favorecida por el recurso que es internet”, dice. “Puede ser un buen momento, porque la formación requiere de un tiempo que habitualmente no tenemos, y sin embargo lo considero algo importante”, advierte. No obstante, admite que también destina parte de su tiempo al ocio, a disfrutar de alguna serie, como The Blacklist o The Good Doctor. “Me gustan, pero bueno, no es algo que vea cada día”, confiesa. Se decanta por invertir en el crecimiento personal.

“hay que estar activos” Como cuerpo y mente son uno, recomienda a la ciudadanía no dejar de lado el ejercicio físico. “Ahora hay una tendencia a cuidarse, y es un buen momento para, dentro de lo posible, hacer ejercicio, porque además de mejorar el estado físico, ayuda a combatir las situaciones de ansiedad que se pueden generar por el aislamiento. Es algo saludable. Hay que estar activos”, aconseja. Es consciente de que “no se sabe lo que durará este complicado momento que atravesamos”, pero “si estamos tranquilos y hacemos lo que dicta el Ministerio de Sanidad, estaremos aportando para poner fin cuanto antes a esta situación”. Santacana, toda una vida proyectando nieve, aprovecha esta pista para lanzar ánimos a la ciudadanía. El deportista más laureado del olimpismo estatal esquía a tu lado en esta complicada carrera de paciencia cuesta arriba y con eslálones, pero que tiene una meta que llegará: el regreso a la normalidad.