Getxo - Después de relevar en el cargo a un Jabi Luaces que fue cesado el primer día de este mes, Endika Bordas (Bermeo, 8-III-1982), hasta entonces segundo entrenador, se estrenó el pasado sábado como máximo responsable del banquillo del Arenas con un empate en Gobela ante el que fue su penúltimo equipo como jugador, el Amorebieta. Ahora encara otros dos derbis: a domicilio ante los vecinos del Leioa y en casa contra un Gernika en el que colgó las botas en el verano de 2017 y en el que ejerció como ayudante de Luaces la pasada campaña. El reto, sellar cuanto antes la salvación de unos getxotarras que cuentan con una renta de cinco puntos sobre el descenso a falta de seis jornadas para el final.

¿Qué tal su primera experiencia al frente del banquillo de Gobela?

-Un poco nervioso, porque ha sido todo muy de repente y te ves un poco en un precipicio. Pero lo cierto es que el equipo me lo está poniendo muy fácil y no me puedo quejar.

¿Se vive muy diferente un partido como segundo que como primer entrenador?

-Tampoco te creas. También se tienen nervios. Pero sí es verdad que ahora soy el máximo responsable y la cabeza visible.

El guion fue el clásico de un derbi. Mucha igualdad y pocas ocasiones.

-Sí, fue un partido muy cerrado, con mucho juego directo. Acabé contento porque el equipo dio la cara e igualó un resultado adverso después de una semana complicada.

Vaya manera de empezar. Contra un ex equipo y ahora frente a sus vecinos del Leioa.

-Sí, ha sido raro. Ha venido así y no se puede hacer más que asumirlo y mirar hacia delante.

¿Qué partido espera contra el Leioa?

-Será un encuentro complicado contra un equipo que está haciendo las cosas muy bien, aunque ahora no atraviesa por una buena dinámica de resultados. Ellos también se juegan entrar en Copa e incluso tienen opciones de play-off, así que será disputado.

Ya había dirigido a equipos de categorías inferiores en el Bermeo y el Gernika, pero entrenar a un Arenas en Segunda B ya son palabras mayores. ¿Se siente preparado?

-Nunca se sabe, el tiempo lo dirá. Lo cierto es que no me lo esperaba, pero la situación invitaba a tomar el reto e intentar hacerlo bien. Más aún sabiendo que ya conocía a la plantilla y eso es un punto a favor.

En su carrera como futbolista ha tenido entrenadores como Valverde, Paco Jémez o Mendilibar. ¿A quién le gustaría parecerse?

-No es cuestión de parecerse a alguien. Hay que ser consciente de qué equipo tienes y en qué categoría estás. Y amoldarse a ello. No se juega igual en Primera, en Segunda y en Segunda B.

Vayamos al pasado día 1. ¿Cómo vivió el momento en el que le ofrecen el cargo de primer entrenador?

-Fue raro. Fue una decisión meditada por el club, pero que nos pilló por sorpresa. Consideró que Jabi tenía una buena idea, pero los resultados no han acompañado. El club quería un cambio, pero a estas alturas preferían a alguien que conociera a la plantilla. Me lo tomo como una manera de aprender. Todavía me queda mucho y esto quizá me ha venido pronto. Pero ha sido así.

¿Habló con Jabi?

-Sí, le expuse mi situación y queda entre él y yo. No tengo ningún problema con él. Conmigo se ha portado siempre espectacular y solo tengo palabras buenas hacia él.

¿Se verá a un Arenas muy diferente?

-La idea de Jabi era buena. Intentaré modificar algunos pequeños matices, pero para siete jornadas no se puede dar un cambio grande. Los chavales tienen que tener las ideas claras y no volverles locos.

¿Cuáles son esas pequeñas cosas que le gustaría cambiar?

-(Risas). No lo voy a decir, porque entonces lo van a saber todos los demás. Son algunos aspectos del juego que se irán viendo poco a poco.

Cinco puntos por encima del peligro a falta de seis jornadas. ¿Confía en sellar pronto la permanencia o tocará apretar los dientes hasta el último día?

-No me lo planteo. Solo quiero sacar los tres puntos este fin de semana. Cuanto antes hagamos los deberes, mejor para todos.

¿Qué tal el trato con el vestuario?

-Muy bien. Ellos son conscientes de la situación y de cuál es mi rol. Intento ser cercano y comprensivo en la convivencia. Entrenan bien y son muy profesionales, para un entrenador este vestuario es una maravilla.

La falta de gol está siendo su principal problema.

-El número de goles no es muy alto, pero también tenemos que mirar por qué no han llegado y trabajar para corregirlo. No creo que a esta plantilla le falte gol. Es importante que se liberen mentalmente.

El sábado retornó el que en teoría estaba llamado a ser el nueve del equipo, Etxaniz, justo después de cumplir una vuelta entera lesionado.

-Sí, jugó un rato al final. Vamos recuperando lesionados importantes cuya ausencia nos ha mermado. Pero también debo decir que en esta plantilla puede jugar cualquiera y tenemos variedad. Arriba tenemos otros jugadores de calidad como Aitor Ramos, Dani López, Jose o Güemes.