Bilbao Basket84

Gipuzkoa Basket73

BILBAO BASKET: Rousselle (0), Brown (14), Bouteille (23), Kulboka (11), Lammers (11) -cinco inicial- S. Rodríguez (8),Schreiner (3), Cruz (5), Basterretxea (0), Doblas (7), Van Lacke (2).

GIPUZKOA BASKET: Dee (9), Murphy (2), Uriz (6), Rozitis (19), Sollazzo (10) -cinco inicial- Mutic (0), Oroz (0), Jawara (4), Motos (2), Timmer (11), Faye (10).

Parciales: 25-19, 48-29 (descanso), 68-57 y 84-73.

Árbitros: García González, Sánchez Mohedas y Manuel. Eliminaron a Rousselle.

Incidecias: Casi lleno con unos 1.600 espectadores en el Polideportivo José Emilio Amavisca de Laredo.

laredo - El Bilbao Basket sumó ante el Delteco Gipuzkoa Basket su primera victoria de la pretemporada en un partido que los jugadores estaban deseando afrontar y también los aficionados, deseosos de ver a todas las incorporaciones que dan al equipo una nueva imagen y, probablemente, un nuevo estilo de juego. Mientras aguantaron las piernas, los hombres de negro mostraron deseo de defender y correr para anotar rápido, aunque eso también suele provocar, sobre todo a estas alturas de la preparación, más errores de los deseados.

En todo caso, las dos primeras anotaciones del Bilbao Basket sirvieron para despejar algunas dudas. Jonathan Rousselle y Ben Lammers conectaron muy arriba en el pick and roll y el de Georgia convirtió un dos más uno para dejar una acción que sonó de algo a los aficionados vizcainos y que seguramente no se echará de menos esta temporada. Después, el sexto punto en el marcador subió tras un triple de Arnoldas Kulboka, que desenfunda rápido y supone una amenaza para la defensa rival incluso llegando en transición. El Delteco GBC mantuvo la cara al partido durante los primeros cinco minutos, cuando los dos equipos querían mantener un ritmo alto. En ese momento, apareció Axel Bouteillesin hacer ruido para sumar ocho puntos seguidos y dar el primer estirón importante (22-13).

Las rotaciones permitieron al Bilbao Basket mantener la intensidad sobre el parqué, con una defensa muy agresiva en algunas situaciones que provocaron los errores de los donostiarras, empeñados en visitar sin éxito los dominios de Lammers. El juego del Delteco GBC, que al fin y al cabo es ahora un equipo de la LEB, se hizo inofensivo y los dirigidos por Álex Mumbrú pudieron correr y rompieron el amistoso con un parcial de 13-0 que puso el 46-25. Para entonces, Bouteille ya llevaba 17 puntos y había demostrado que juega un baloncesto sencillo y fluido.

En el tercer cuarto, el Bilbao Basket bajó un poco el tono físico, su ataque perdió fluidez y frescura y el trabajo bajo los aros de Rozitis, ex del Ourense, permitió al conjunto donostiarra recortar las distancias y llevar el duelo a un mayor equilibrio. Schreiner y Rousselle, que apenas miraron al aro y se ocuparon sobre todo de dirigir a sus compañeros, no acertaron en ese rato a poner orden cuando las cabezas estaban a mil cosas y los hombres de negro vieron a su rival más cerca, aunque el Delteco GBC solo pudo llegar hasta un 77-71 a tres minutos y medio del final. La defensa del Bilbao Basket siempre estuvo ahí para evitar que los daños fueran mayores en un tramo final de más errores que aciertos en ambos bandos.

Cuando el aire escaseaba, el Bilbao Basket supo al menos alargar sus ataques para proteger su ventaja en el marcador de Laredo. El junior Gonzalo Basterretxa dispuso de tres minutos para tratar de colaborar en la defensa de Johnny Dee, el tirador en el que los guipuzcoanos han depositado muchas esperanzas. El chaval no lo hizo mal y cumplió con su tarea. Lammers regresó a la cancha para cerrar la zona y atrapar doce rebotes y el equipo vizcaino pudo sumar al menos desde los tiros libres. Por si acaso, Bouteille echó el candado al partido con un triple a falta de un minuto que elevó su cuenta a 23 puntos.

Buen ensayo Al final, todo el mundo se quedó satisfecho por lo que vio en un ensayo que mostró la diferencia de categoría entre ambos conjuntos, aunque el Delteco GBC peleó para disimularla y obligó al Bilbao Basket también a exprimirse después de dos semanas de entrenamientos exigentes. Esta próxima semana llegará otra buena prueba de fuego con el torneo de Lisboa en el que los vizcainos jugarán tres partidos seguidos. Seguramente por eso ayer no jugó Rafa Martínez, a quien no se quiso forzar por una sobrecarga y se sumó a las ausencias de Balvin, Rigo y Sulejmanovic. Sin esas cuatro piezas, el Bilbao Basket fue capaz de dar un nivel notable.