El partido entre Carlos Alcaraz y Alexander Zverev de cuartos de final de Indian Wells tuvo a un protagonista inesperado, después de que el enfrentamiento tuviera que ser detenido este jueves durante más de una hora y cuando se llevaban solo 9 minutos de juego debido a la aparición de un gran grupo de abejas en la pista.

Con 1-1 en el marcador y 15-0 para el murciano, el juez de silla ordenó detener el juego en la pista central del torneo del desierto californiano porque las abejas hacían imposible jugar e incluso estaban atacando a Alcaraz, quien se tuvo que meter corriendo al vestuario.

El murciano, que se disponía a sacar, empezó a mirar de un lado a otro al ver a más y más abejas y levantó los brazos sin entender qué estaba pasando antes de irse de la pista.

"El juego se ha detenido debido a una 'invasión de abejas'", dijo bromeando el juez de silla, quien también sufrió algunos ataques de abejas.

Las imágenes de televisión mostraron que una de las cámaras en altura de la pista (conocida como 'spidercam' ya que se mueve suspendida por cables) era lo que estaba atrayendo a las abejas. Cuando la organización se dio cuenta, elevó la cámara lo más alto posible para tratar de alejar a las abejas de la pista.

Posteriormente, un apicultor, armado con una aspiradora y asombrosamente sin ningún tipo de protección en la cara o las manos más allá de unas gafas de sol, fue llamado por los responsables del torneo para retirar las abejas de la cámara desde la zona más alta del estadio.

Un apicultor famoso

El apicultor es Lance Davis, responsable de la empresa Killer Bee Live Removal, quien hizo acto de presencia en la pista de tenis con una sudadera con el nombre y el número de teléfono de su empresa. Se trata de un profesional bastante conocido en EEUU -tiene incluso su propio canal de Youtube y ha protagonizado algunas apariciones televisivas- por su habilidad para acabar con los enjambres de abejas, aunque él asegura que no las mata, sino que simplemente se encarga de retirarlas de forma segura.

Las redes sociales no tardaron en hacerse eco de lo ocurrido e incluso la cuenta en X de Indian Wells ironizó con el tema colgando un emoticono de una abeja e imágenes de lo sucedido.

Después de un larguísimo parón, durante el que se vio a Alcaraz y Zverev esperando en los vestuarios del estadio y también volviendo a calentar, el partido se pudo reanudar ya sin peligro de abejas para los tenistas y el público.

Ambos tenistas salieron sonriendo a la pista y con buen ánimo después de ese singular parón y mirando a todos lados como si quisieran asegurarse de que no hubiera ninguna abeja en el horizonte.

Ya en la pista, Alcaraz y Zverev que esperar unos minutos más a que se retiraran las últimas abejas del lado en el que estaba sacando el de El Palmar y también de las primeras filas de las gradas.

Ovación al apicultor

Hasta ahí bajó el apicultor, ahora con un spray en la mano y entre los aplausos del público para el sorprendente y ya inolvidable salvador del día.

El técnico incluso se tomó algunos selfis con los fans y sonrió a una cámara de televisión, mientras los tenistas contemplaban la escena desde la pista entre risas. Después habló con Alcaraz y Zverev junto a la red para explicarles la situación.

Alcaraz, durante el calentamiento, mostró sus reparos a la organización ya que decía que estaba más "concentrado" en vigilar que no hubiera abejas que en golpear a la bola.

Pero por fortuna y tras una hora y 48 minutos de parón, el tenis volvió a la pista central de Indian Wells, que terminó con victoria de Alcaraz. "No voy a mentir: tengo un poco de miedo a las abejas", afirmó el murciano en declaraciones a los medios tras su triunfo.