Rafa Luz jugará el domingo el derbi desde el otro lado. Exjugador del Baskonia en la temporada 2016-17, el base brasileño es ahora uno de los líderes del Surne Bilbao Basket y su termómetro dentro de la cancha, aunque unos problemas en la rodilla le vienen limitando desde hace unos meses: “Me duele menos cuando me duele”. Al menos, sigue estando disponible para dirigir a un equipo que se ha instalado en una posición cómoda, pero que puede ser peligrosa si no se maneja bien. “Aún no estamos salvados, aunque nos encontramos en buena posición. Pero no nos relajamos. Los de abajo están ganando partidos y hasta que no tengamos la permanencia, no miraría otros objetivos. Hay que seguir ganando partidos”, advirtió ayer.

La buena racha del Bilbao Basket le llevó a escapar de la zona peligrosa, pero a la vez “ha hecho que los equipos se preparen mejor contra nosotros. Eso quiere decir que nos respetan, pero nos obliga a nosotros a estar en alerta”. En este sentido, Luz reconoció que el equipo ha bajado algo sus prestaciones defensivas en los últimos duelos y que ha acusado la ausencia de Hakanson ya que “crea opciones para él mismo y para los demás”. El derbi volverá a contar con público, “algo que lo hace más atractivo, supone una motivación añadida y significa que vamos por el buen camino”. Esto debe hacer que el Bilbao Basket recupere ese espíritu de “luchar hasta el final, que es lo que el público se merece”.

Rafa Luz conoce bien al Baskonia. El conjunto gasteiztarra tiene doble jornada de Euroliga esta semana, pero avisó de que “hay que esperar su mejor versión. Son plantillas preparadas para estos esfuerzos”. Los de Neven Spahija se muestran muy irregulares en su juego, aunque Luz señaló como clave “frenar a Baldwin y Granger. Creo que nos van a atacar por ahí”. -