Bilbao - Autodidacta, enérgica y llena de magia. Bely Basarte, cantante y youtuber, actuó ayer en la Sala Santana y asegura que el público bilbaino es “fantástico y muy entregado”. En el concierto de ayer, incluyeron más temas para “saltar, bailar y cantar a pleno pulmón”. Y, sin duda, el público respondió con creces. “La música en directo es para sentir”, dice la joven madrileña.

¿Cuándo se dio cuenta que quería dedicarse a la música?

-Es algo que he querido hacer siempre. Empecé a escribir mis propias canciones, después me regalaron una guitarra y vi que la música era una forma de expresar mis sentimientos.

Su disco le está llevando de gira por muchas ciudades. ¿Cómo lo está viviendo?

-Con mucha emoción. Es muy bonito llegar a una ciudad a la que nunca has podido ir, o que igual visitas por segunda vez en tu vida, y ver que hay gente que se siente identificada con tu música, que están dispuestos a acudir a un concierto para compartir contigo una noche bonita, de sentimientos y llena de energía. Es muy satisfactorio haber escrito desde mi habitación y ver que gusta por todo el Estado y que la gente lo quiere compartir y disfrutar conmigo.

Se introdujo en el panorama musical subiendo covers a Youtube. ¿Por qué se decantó por ese canal?

-Era lo que estaba más a mi alcance. Lo que tenía en casa era el ordenador, el móvil para grabarme y la guitarra. Youtube fue esa ventana al mundo a la que yo pude acceder desde mi propia habitación. Además de eso, cogía mi guitarra y me iba al centro de Madrid a tocar en la calle o daba pequeños conciertos en algunas salas. Antes de aprender a tocar la guitarra yo ya escribía mis propias canciones. Encontré que era mi forma de expresar lo que tenía dentro cuando no conocía una canción que describiese exactamente como me sentía.

¿Cuál es el ámbito en el que cree que más ha evolucionado?

-En todo. Las versiones al principio siempre eran canciones en inglés. No estaba a gusto cantando en castellano porque no me gustaba cómo sonaba mi voz y ahora mis propias composiciones han terminado siendo en mi idioma. A nivel de producción también veo un cambio porque todo me lo he grabado a mi misma, tanto la música como el vídeo. Estuve subiendo un vídeo a la semana y el proceso de aprendizaje fue muy rápido porque todas las semanas había algo en el vídeo que no me gustaba y lo corregía para el siguiente vídeo. He sido muy autodidacta.

¿De donde le viene la inspiración?

-Normalmente de experiencias propias y sentimientos que necesito expresar y sacar de dentro de mi.

¿Qué siente en un escenario?

-Me evado un poco de todo lo que me rodea para concentrarme en lo que está pasando y hacer bien las canciones para transmitir lo que realmente quiero expresar. Cuando me doy cuenta de lo que ha pasado es cuando me bajo del escenario que digo, ¡Guau, ha sido espectacular!. Realmente había muchas personas cantando mis letras y sintiéndolo. Es una sensación preciosa.

Está trabajando en tu próximo disco. ¿Cómo van las canciones?

-Efectivamente, estamos ahora trabajando en él y las canciones van muy bien. Estoy terminando de componer algunas, otras ya están terminadas y estamos trabajándolas en el estudio. Estamos buscando ese paso natural que haría justicia a la evolución que he ido trayendo.

¿Cree que los artistas tienen fecha de caducidad?

-Para nada. Yo creo que los cantautores y los cantantes van a hacer falta siempre. Eso quiero pensar. La música está evolucionando pero eso es lo bonito. La gente va a necesitar siempre música en su vida, creo que nadie se puede imaginar un día sin música o sin alguien que, de alguna manera, exprese sus sentimientos. Ahora se permite experimentar con todo, mezclar varios estilos y me parece que no es un momento malo.

Qué considera más importante, ¿llenar una sala o vender discos?

-Ambas cosas son importantes, pero para mí la prioridad es llenar a la gente. Considero más importante que la música llegue a mi público y que les acompañe en los momentos buenos, en los malos y que lo hagan parte de su banda sonora.