Las primeras pedaladas del Tour de Francia de 2023 se darán en Bilbao. La capital vizcaina será salida y meta de la primera etapa de la próxima ronda gala. Es decir, el botxo dirimirá el primer maillot amarillo de la siguiente Grande Boucle. Será el próximo 1 de julio; pero, aunque aún quedan más de cinco meses, la Grand Départ ya está generando muchísima expectación en Bilbao. Porque no todos los días el Tour pasa por delante de tu casa. En total serán 185 kilómetros y 3.300 metros de desnivel acumulado que recorrerán los principales enclaves vizcainos en un itinerario circular y sinuoso. Partirá desde la explanada de San Mamés y finalizará con la Basílica de Begoña como testigo de una meta en alto, con una pendiente de un 5%.
“En El Vivero se verá quién puede y quién no; y luego en la subida a Pike habrá mucha gente que se quede. En Bilbao se verá la primera selección de lo que será el resto del Tour”
Pero la etapa del Tour de Bilbao se hará grande en las montañas. Los altos de Gontzagaraigane, Morga, San Juan de Gaztelugatxe, el Vivero y Pike serán los enemigos de los ciclistas, en una dura jornada rompepiernas. En la que es, posiblemente, la etapa inicial más montañosa de la historia de la Grande Boucle. Así lo reconoce Aitor V. Morell, coordinador de L'Étape Bilbao 2023 (la marcha cicloturista que se celebrará el 11 de junio en el mismo trazado del Tour), al decir que la de la capital vizcaina “es de las etapas iniciales más potentes de los últimos Tour de Francia”.
A su lado, el director de carrera de la ronda gala, Thierry Gouvenou, asiente. Hace un par de años ya, el francés aterrizó en Euskadi con el objetivo de “buscar itinerarios”. De conformar una etapa digna de la Grande Boucle. “Cuando estoy en un país que no es el mío, recurro a corredores locales que conozcan las carreteras para que me ayuden”, admite. Así Gouvenou marcó el número de Joseba Beloki, exciclista y tres veces podio del Tour de Francia, y entre los dos diseñaron un “recorrido muy difícil, que requiere de mucha técnica y de mucha fuerza”, tal y como explica el mismo director de carrera del Tour.
“Lo que pretendíamos con este trazado es dar oportunidades a los corredores que van a participar. Tenemos El Vivero, donde se verá quién puede y quién no; y luego la siguiente subida es Pike, donde habrá mucha gente que se quede”, prosigue Gouvenou. Así, el director de carrera considera que esta primera etapa de la ronda gala llegará “a meta con las cosas relativamente claras y con la primera selección de lo que será el resto del Tour”.
Duro, pero espectacular
Respecto a las localizaciones escogidas para el paso del pelotón, Gouvenou explica que su intención siempre ha sido la de “insistir en Bilbao y en sus paisajes de alrededor”. Que su único objetivo es “disfrutar de la orografía” que presenta Bizkaia. Porque el director de carrera sabe que hay mucho más que el museo Guggenheim y por ello, con su trazado, se mostrará al mundo lugares tan emblemáticos como la Reserva de la Biosfera de Urdaibai, con Gernika y San Juan de Gaztelugatxe como sus joyas más relucientes. Asimismo, Gouvenou se ha mostrado sorprendido por la cantidad de corredores que se cruzaba mientras analizaba el trazado de la primera etapa junto a Beloki. “Ahí me di cuenta el peso que tiene el ciclismo en esta sociedad, así que esta es la forma de devolver o la forma de estar al nivel de las expectativas que hay creadas”, concluye.
Junto al director de carrera del Tour, Ziortza Villa sonreía. La tetracampeona de Europa de ultrafondo conoce bien las carreteras por las que circulará el Tour de 2023 en su primera etapa porque son las que utiliza, junto a miles de compañero, para entrenar. “El recorrido elegido es espectacular, no es casualidad que Thierry haya visto a muchos ciclistas en él porque es un recorrido habitual para los que aún estamos en activo y para los aficionados”, dice. Asimismo, la encargada de traer junto a Julián Sanz el testigo de la Grand Départ a Bilbao recalca que “además de las subidas a El Vivero y Pike, no hay que olvidar que la etapa va a discurrir por la costa más salvaje de Euskadi, de Armintza hasta Bakio; y hará que se conozca internacionalmente Urdaibai. Va a ser espectacular”.
