La venaquería fue una actividad complementaria a los trabajos del campo y la huerta que durante varios siglos llegó a ser muy lucrativa para algunos pueblos costeros mediante la explotación y acarreo del cotizado mineral de hierro de los Montes de Triano -conocido como la “vena”- hasta los puertos venaqueros como el de Pobeña para su transporte a las ferrerías de la cornisa cantábrica o la navarra de Urdax. Esta actividad acabó drásticamente en 1876 finalizada la II Guerra Carlista por el triunfo del liberalismo que derogó los Fueros y eliminó los derechos exclusivos de explotación de los encartados sobre sus montes comunales. Poco a poco esta cultura venaquera fue quedando en el olvido hasta que hace nueve años surgió Pobeña 1890 por iniciativa de Trueba Zentroa, con el apoyo del Ayuntamiento de Muskiz y de los pobeñeses. “El objetivo era sacar del olvido más de cinco siglos de actividad minera en las Encartaciones y, sobre todo, en los Montes de Triano”, reseñó el director de Trueba Zentroa, Ricardo Santamaría.

Popular “Hubiese sido imposible su desarrollo sin la participación de los pobeñeses que, desde el momento cero, lo asumieron como un proyecto propio y año tras año se caracterizan y montan escenarios para recrear un momento de aquella vida de finales del siglo XIX”, añadió. Este año el evento además de escenarios que rememorarán las abacerías, el lavadero, la herrería, las hilanderas, actividad agropecuaria, notario, taberna, o los bateles, se hará eco del la Campaña de Divulgación Bicentenario del nacimiento de Antonio de Trueba, recibiendo a sus descendientes directos -que se desplazarán desde Madrid- a los que se hará un reconocimiento junto a la pobeñesa Clotilde Gorbea.

A las 12.00 horas se escenificará el casamiento de dos jóvenes de la localidad levantando acta el alcalde-notario y siguiendo la comitiva en su pequeño carro tirado por el burrito Perejil hasta la casa paterna.

Recordando aquel siglo XIX se incorpora a la escenificación un cuartel de vigilancia del transporte de la vena con tres soldados que mantendrán el orden y vigilarán las cargas y descargas de mineral.