- Álex Galán ha llegado a la Liga Endesa por carreteras secundarias. Lo normal con 21 años sería estrenarse en la competición a través de algunas de las canteras de los clubes de la ACB, pero el ala-pívot extremeño lo hace tras brillar en los últimos años con el Alicante en la LEB Plata y la LEB Oro. "Llevo mucho tiempo luchando por esto y estoy muy agradecido al Bilbao Basket por haber apostado por mí", reconoció ayer en su presentación oficial en las instalaciones del IMQ un jugador que no está acostumbrado a acaparar la atención. Galán nació en la localidad pacense de Calamonte y se formó en el San Antonio, una de las cunas del baloncesto cacereño. Con edad cadete, le reclutó el Joventut, ha sido internacional en las selecciones formativas y con apenas 17 años pudo debutar en la LEB Oro en las filas del CB Prat, equipo vinculado de la Penya, en el que coincidió con el getxotarra Xabi López-Arostegui.

Después, regresó una temporada a su tierra para jugar en el Plasencia de la LEB Plata y los tres últimos cursos ha estado en Alicante donde ha consolidado su progresión por la energía con la que se emplea en la cancha, que le hace ser muy productivo. Pedja Savovic presentó al extremeño como un jugador que "puede jugar en las posiciones de cuatro y de cinco y que por su edad tiene mucho margen de mejora y mucho recorrido por delante que esperamos que cubra con nosotros". Álex Galán explicó que la llamada del Bilbao Basket "me pilló por sorpresa porque estaba de vacaciones, pero fue una alegría muy grande y no tuve mucho que pensar cuando apareció la oportunidad. No podía dejarla pasar porque es un equipo del que he disfrutado viéndolo cuando estaba en su máximo esplendor y ahora espero aprovecharla".

Las referencias que le llegaron de su nuevo destino fueron inmejorables, no en vano la pasada temporada compartió vestuario y piso en Alicante con Jorge Bilbao, pívot bilbaino que ahora va a jugar en Castellón, "y que es muy de Bilbao y me ha hablado cada día maravillas de la ciudad. Por lo que he visto, tenía razón, me está gustando mucho". El rol de Álex Galán en el equipo no será, en principio, muy importante, pero su versatilidad en el juego interior desde sus 2,07 metros le puede permitir hacerse un hueco para demostrar sus virtudes al más alto nivel. Él se considera "un jugador de equipo que puede aportar muchos intangibles, siempre voy al 100%" y, además, eleva la exigencia de los entrenamientos ya que no rehúye el contacto y se emplea con intensidad.

En las palabras de cada jugador que ha llegado a Bilbao este verano, se nota la ilusión y la motivación para no repetir la agónica experiencia del curso pasado. Álex Galán no es una excepción y aseguró que "la gente está bastante ilusionada con el equipo que tenemos y todos creemos que se puede hacer un papel mejor que el del año pasado. Estamos con ilusión y ganas de empezar, aunque la semana pasada hemos estado poca gente y espero que esta ya podamos ver más o menos lo que podemos hacer". Además, su llegada al Bilbao Basket coincidirá con el regreso del público a Miribilla. "Todo el mundo me ha hablado muy bien de la afición de Bilbao, de lo que aprieta, y tengo ganas de comprobarlo", indicó.

Por otro lado, ayer se produjo la llegada a Bilbao de Jeff Withey, que se ha dilatado a causa de los trámites sanitarios y burocráticos que el pívot estadounidense ha tenido que cumplir y respetar escrupulosamente tras haber pasado el covid. Ahora ya podrá incorporarse a la disciplina del grupo y a la concentración que el equipo va a realizar desde mañana hasta el domingo en Gijón.

"Todo el mundo me ha hablado muy bien de la afición de Bilbao, de lo que aprieta"

Nuevo jugador del Bilbao Basket