Bilbao - La capital vizcaina se vistió de fiesta durante la semana pasada para visibilizar la libertad sexual y, ayer, se conmemoró en todo el mundo el nacimiento del movimiento LGTBIQ+ por ser el Día Internacional del Orgullo LGTBIQ+ que reivindica el reconocimiento y ejercicio de los derechos civiles y los derechos sexuales en todo el mundo.

Sin embargo, la constatación de que más de setenta países persiguen la libertad sexual como un delito, castigando las diferentes identidades y opciones sexuales y de género, en no pocas ocasiones, con pena de muerte, debe hacer reflexionar sobre las consecuencias de los discursos de odio y de quienes propagan mensajes contra la diversidad sexual. “Está en manos de toda la sociedad y también de los y las representantes de la ciudadanía la responsabilidad última de promover activamente los cambios sociales precisos que hagan posible el efectivo reconocimiento del derecho a vivir la sexualidad y el género en condiciones de igualdad, libertad y respeto”, afirmaron fuentes del Ayuntamiento de Bilbao mediante un comunicado.

Desde el Consistorio reiteraron su más firme rechazo a la violación de los derechos de la comunidad LGTBIQ+, “asumiendo el papel activo en la defensa de las libertades que nos corresponde como representantes de la ciudadanía bilbaina”.

En esta misma línea, manifestaron su compromiso de trabajar por la igualdad de todos los ciudadanos con independencia de la orientación e identidad sexual de la persona, “y asumimos como propio el objetivo de poner fin a la violencia y la discriminación contra las personas debido a su orientación sexual e identidad de género y/o sexual, fomentando una sociedad abierta y tolerante que condene y reaccione enérgicamente ante cualquier expresión de discriminación”. Igualmente, trasladaron su reconocimiento a todas las organizaciones, mujeres y hombres activistas en la defensa de los derechos de las personas LGTBIQ+ “que realizan una importante labor de en la construcción de una sociedad más justa e igualitaria”.

El Ayuntamiento de Bilbao se pronunció, también, a favor de una educación afectivo-sexual que sepa integrar sin conflicto los modelos de feminidad y masculinidad no homogéneos. - DEIA