Durante siglos, los vecinos de los actuales municipios de Santurtzi, Ortuella, Trapagaran y Sestao, formaron un único pueblo o república denominada de los Tres Concejos del valle de Somorrostro, perteneciente a la comarca de Las Encartaciones. La administración de los Tres Concejos estaba formada por la Junta General o Concejo Abierto, que consistía en una asamblea en la que participaban el regimiento, grupo de autoridades que llevaba las riendas de la república, y los vecinos que quisieran asistir.

Esta Junta, que se celebraba el primer día del año, se llevaba a cabo en la campa de San Bernabé, situada junto a la ermita del mismo nombre, en el barrio de Urioste. Su convocatoria siempre se hacía en domingo o en festivo y la participación en ella estaba abierta a todos los vecinos que lo desearan. Los temas que habitualmente se trataban, amén de la elección de cargos municipales, eran los referentes a arreglos de caminos, ordenanzas y repartimientos, incluido el seguimiento y comprobación de las cuentas municipales.

Recreación

Este sistema de organización foral asambleario perduró hasta mediados del siglo XIX. En 1845 se promulgó la Ley Municipal por la que se regulaban las administraciones locales, favoreciéndose la separación definitiva de los Tres Concejos y su conversión en ayuntamientos autónomos a partir del 1 de enero de 1847. “A pesar de todo, la Junta de los Tres Concejos, aun careciendo de contenido, se siguió celebrando, cada vez más distanciadamente, para tratar temas comunes como eran los Altos Montes de Triano y las veneras. No en vano la riqueza de sus montes –forestal y minera– eran bienes muy preciados que despertaban no pocas riñas y conflictos con empresas, personas e incluso con la Casa Real, que pretendieran saltarse las leyes como la prohibición de edificaciones en el monte indiviso”, reseña Ricardo Santamaría, director del Centro de Investigación y Documentación Trueba que junto con el Ayuntamiento de Ortuella está inmerso en un proyecto etnográfico para poner en valor este vestigio del acervo cultural de la zona.

En este sentido, este pasado domingo se reunieron en la ermita de San Bernabé diversos representantes de Trueba Zentroa, acompañados por el exconcejal Jose Ángel Seijo –declarado defensor de la difusión de esta singular organización popular– así como miembros de la asociación recreacionista de la batalla de Somorrostro y colaboradores del Museo de la Minería del País Vasco como Alberto Bargos, o el historiador Txomin Etxebarria. “La reunión sirvió para avanzar detalles de los actos que pretendemos hacer en 2026 en torno al 11 de junio que es cuando se abre desde hace varios años la ermita a la ciudadanía que puede conocer la historia de los Tres Concejos gracias a diversos murales realizados por el ortuellarra Juan Ignacio Rodríguez Camarero. Así planteamos dos grandes actividades: una marcha guiada por los montes indivisos y en San Bernabé celebrar, en sus aledaños, una recreación teatralizada de una junta vecinal”, explicó Santamaría.

Para la elección, en la Junta General se rellenaban papeletas con los nombres de los vecinos presentes de cada Tercio. Las papeletas se introducían en un cántaro –en cascabeles de plata– y tras ser agitadas s elegían primero a los electores y luego a los cargos a través de la extracciones que hacía un niño.

Al detalle

Junta vecinal. Hasta la promulgación en 1845 de la Ley Municipal que regulaba las administraciones locales, Santurtzi, Trapagaran y Sestao formaban parte de un solo pueblo: los Tres Concejos.

Recreación. En aras a la pervivencia de esta singularidad, el Ayuntamiento de Ortuella y Trueba Zentroa recrearán en 2026 una Junta vecinal abierta.