El impago de las ayudas lleva al límite al tiempo libre de Portugalete
El Ayuntamiento adeuda la subvención de 2023 a estos grupos que tiran de ingenio para mantener su actividad
Los grupos de tiempo libre de Portugalete han vuelto a confeccionar una amplia programación veraniega para que los niños y jóvenes jarrilleros cuenten con una gran oferta de ocio estival. Todo ello pese a que están viviendo una situación límite debido al impago de las subvenciones del último verano y del curso pasado que les debía haber otorgado el Ayuntamientodurante 2023. Esta circunstancia está haciendo que estos colectivos hayan tenido que redoblar esfuerzos y tirar de fórmulas más imaginativas si cabe para poder sacar adelante su programación veraniega. “Esta situación se está dilatando en el tiempo demasiado y nos está comiendo la inanición porque los grupos tenemos que tener ingresos. Esta falta de recursos no nos está llevando a suspender actividades porque, hasta el momento, estamos teniendo la capacidad de entre nosotros sacarlo adelante y tirar de programas más económicos”, desarrolló Javi Carnicero, miembro de Portugaleteko Aisialdi Sarea.
Hasta el momento, los grupos de tiempo libre de la villa están saliendo al paso de esta delicada situación gracias a la buena voluntad y disposición. A la buena voluntad y la disposición de, por un lado, quienes forman parte de estos grupos y, por otro, de los proveedores. Pero desde el tejido asociativo de tiempo libre de la villa se sostiene que esta situación ha de volver a la normalidad cuanto antes. No es la primera vez que desde el tejido asociativo portugalujo se pide al Consistorio más celeridad a la hora de abonar estas ayudas que, en algún caso, acumulan ya un año de demora. El pasado mes de marzo ya manifestaron la necesidad de que el Ayuntamiento se pusiese al día con sus deberes. “En marzo ya hablamos de esta situación y el mensaje que se nos trasladó fue que se ingresarían cuanto antes. Ahora nos vemos en la misma situación y lo único que queremos es poder mirar hacia adelante”, concluyó Carnicero.