El sector de peluquería se encuentra revolucionado tras las últimas publicaciones sobre un brote de tiña entre la población masculina ya que denuncian que estas informaciones “desprestigian al sector” cuando los casos detectados han sido 107 entre un mínimo de 270 millones de servicios de peluquería, lo que suponen un 0,0000004%.

El foco se ha puesto en las peluquerías low cost, sin embargo, desde la patronal confiesan que “no existe ninguna responsabilidad ni relación causal directa”. Cristina Oñate, presidenta de BIPE, Asociación de Empresas de Imagen Personal de Bizkaia, ha asegurado a este periódico que “no hay que estigmatizar” este tipo de peluquerías ya que “el problema viene de la falta de higiene” algo que nada tiene que ver con el tique medio o precios de cada salón. Oñate indica que “el problema es de la falta de higiene y de aquellos que trabajan en clandestinidad”. Sin embargo, afirma que “que cuatro trabajen mal no significa que los demás lo hagamos mal” ya que asegura que en el 99,9% de los salones se cumple de forma escrupulosa con los protocolos higiénico-sanitarios.

Por todo ello, han enviado a los socios de la Asociación un comunicado “para que se tranquilicen”. “Les hemos trasladado que no es una epidemia, que son casos puntuales y que lo único que tienen que seguir haciendo es lo que ya hacen: esterilizar los materiales”, ha matizado. En relación a las medidas de higiene que se cumplen en los salones, Oñate señala que BIPE cuenta con una central de compras donde “lo que más se vende son esterilizadores”.

En las peluquerías la preocupación también es máxima, más que por los casos de tiña, por el daño que se está haciendo a la imagen del sector. “Yo no atiendo a nadie que tenga síntomas, les derivo siempre al médico, al dermatólogo”, cuenta una peluquera de Urbi, Basauri, que prefiere permanecer en el anonimato. Señala, en la misma línea que la presidenta de BIPE, pone el foco en la falta de higiene; “el problema viene cuando de una persona a otra no se esteriliza la maquinilla de rapar”, indica.

Sobre las medidas de higiene, otro profesional del sector explica que ya su padre hace años, “cuando no había esterilizadores como ahora, tenía una especie de cajas donde guardaba los utensilios separados para cada cliente”.

La higiene es, según afirma el sector, un pilar fundamental. La reciente pandemia, obligó, recordó e hizo a muchos profesionales revisar sus protocolos de higiene establecidos y desarrollados hace décadas en diversas normativas, por ello, desde la patronal señalan que están “convencidos” de que “en la mayoría de los establecimientos se llevan a cabo las medidas y cuidado adecuados”.