Euskal Encounter: aquí no hay teletrabajo

La Euskal Encounter ha vuelto de nuevo al BEC de manera presencial con 5.000 ordenadores y 60GB de internet. La gran feria de la informática ha vuelto a reunir desde este mediodía a fanáticos y profesionales de la tecnología con ganas de disfrutar. A esta cita que se prolongará hasta el día 25 algunos de los asistentes han ido en pijama o con zapatillas de casa, se han puesto cómodos para acercarse hasta este macro evento en Barakaldo para jugar a videojuegos, descargar programas y asistir a conferencias o a los talleres de Spri. Entre lo más destacable de este año, se ha podido ver un área de videojuegos retro, con las clásicas videoconsolas Super Nintendo, Sega o PlayStation 1. Mayores nostálgicos y pequeños curiosos son el público que se ha juntado en esta zona llamada ‘RetroAcción’. 

“Tienes que pasar de pantalla y coger las monedas”, se oía por parte de José Antonio mientras su hijo de 15 años Aarón jugaba a un mítico videojuego de Sonic. “Yo jugaba a esto de pequeño en los años 80-90 y ahora le estoy enseñando a él. Me ha llamado mucho la atención este sitio porque te recuerda a tus tiempos de jugar con los videojuegos”, narraba entusiasmado. Según él, los gustos por los videojuegos y la manera de jugar con ellos ha cambiado porque cuenta que “ahora hay Sonic moderno con mejores gráficos pero a los niños no les gusta. Prefieren el Fornite y jugar desde YouTube. Mi hijo Aarón tiene un ordenador y compite”.

Pepper también está siendo uno de los triunfadores de este evento, un entrañable robot asistente. “En Japón se está utilizando mucho para acompañar a personas mayores que viven solas y también en todo el mundo para que trabaje como recepcionista en hoteles y oficinas”, destaca Jesús Ángel Bravo, director del Camp Tecnológico de Basauri. Según cuenta, este robot detecta al instante cada movimiento de las personas con las cámaras de tres dimensiones que tiene en cada ojo. Está diseñado para que el usuario pueda entrenarlo y le responda a lo que le pregunte, así como para dar la bienvenida. “Me ha sorprendido mucho este robot, te mira como si fuera una persona y es adorable. Me gustaría poder tener uno y que me cuide en un futuro”, contaba fascinada una asidua al evento llamada Maria Jesus mientras miraba al robot. 

Desde la inauguración del evento a las 12:00 no se ha dejado de ver gente durante todo el medio día, llegaba la hora de comer pero muchos de los stands seguían llenos de gente. Desde la zona de impresión 3D que se llenó de niñas fabricando figuras a mano, hasta el área de drones donde muchos usuarios se encontraban pilotando uno de ellos. Los había de tres tamaños: grandes, medianos y minis. “Los grandes son de 5 pulgadas y pueden causar averías. Los que más prueban son los minis”, cuenta Germán, el responsable de este área. Aunque sean pequeños todo aquel que se acerque podrá pilotar estos drones de manera rápida ya que según señaló Germán, el circuito es “grande” y entonces los aviones pueden coger una “gran velocidad”.

Los simuladores de realidad virtual también destacan este año. Como novedad, hay un juego donde el usuario colocándose las gafas de realidad virtual se ve en un escenario donde hay un pequeño incendio. Cogiendo en sus manos el peso de un extintor real, el juego consiste en apagar el fuego. “Se creó para empresas como prevención de riesgos laborales”, señala el creador del juego.