Getxo cuenta entre su rico patrimonio con decenas de edificios históricos. Uno de ellos sin duda es el que da cobijo a la Escuela de Música Andrés Isasi en Las Arenas, un inmueble al que le toca vivir un lavado de cara que, dado el valor patrimonial del mismo, se realizará en base a lo que se conoce como una restauración científica. Así, las obras de reparación de la fachada de la Escuela de Música que dieron comienzo ayer miércoles se realizarán conforme a la normativa establecida en las Leyes de Patrimonio Cultural Vasco y Patrimonio Histórico Español. En las diferentes fases de intervención, los equipos técnicos estarán integrados por personal cualificado con titulación oficial especializada, competente en restauración, y especialistas en fachadas singulares.

En todos los casos se utilizarán materiales probados, adecuados y compatibles con el bien cultural y se irán tratando los diferentes elementos arquitectónicos con las técnicas idóneas para su correcta reparación científica.

La restauración científica se caracteriza por basarse en los ámbitos científicos para aplicar procedimientos técnicos, así como la selección y aplicación de materiales. Se refiere a ciencias como la física, química y, en menor medida, la biología. Ocurre lo contrario con una restauración subjetiva, que se fundamentan en conocimientos de carácter personal, ya que la persona restauradora utiliza materiales que siente que son propios para el objeto y basado en su experiencia; la restauración científica, en cambio, recurre a técnicas científicas de conocimiento y evaluación del objeto, mediante pruebas y diagnósticos científicos.

Los trabajos que dieron comienzo ayer miércoles se enmarcan en un plan de intervenciones que se van a ir desarrollando, de forma progresiva, para mejorar el edificio. A esta obra le seguirán otras actuaciones: mejora del entorno, con la reurbanización del exterior; mejora de la accesibilidad, con medidas como la instalación de un ascensor interior; mejora de la eficiencia energética del edificio (con el cambio de las carpinterías-fase 2 y la sustitución del alumbrado a sistema integral con led) y actuaciones de descarbonización, con la sustitución del gasoil por energía renovable, y mejoras en el equipamiento escénico.

Todas estas intervenciones se suman a las ya realizadas en una primera fase, como el cambio de las carpinterías o la rehabilitación de la cubierta, entre otras. La reforma de la fachada cuesta 134.638 euros (IVA incluido), tienen un plazo de ejecución previsto de tres meses, por lo que se espera que estén concluidos para el inicio del próximo curso.

La actual escuela se sitúa en lo que antes era La Casa Social de Las Arenas. Antes de convertirse en la sede de la Escuela de Música, en la Casa Social se desarrollaron múltiples actividades. La idea primigenia para dotar a Las Arenas de una Casa Social fue de un grupo de ciudadanos areneros comprometidos en actividades socio-culturales de la parroquia de Nuestra Señora de Las Mercedes, a mediados de la década de los años veinte. Fueron los arquitectos Bilbao e Imaz los encargados de dar vida a lo que era una idea. Así la construcción comenzó en 1929.

Antiguo cine

En sus 70 años de historia, la Casa Social albergó muchas actividades. El bello salón, que tenía una capacidad de 500 personas, estaba dedicado al cine y al teatro. Allí pudo ver la población getxotarra las primeras películas del sonoro y tomaron parte activa en innumerables obras teatrales representadas por la gente del pueblo. El cine cesó durante la Guerra Civil y después en la década de los setenta y el local, cerrado, fue objeto de del vandalismo y parcialmente destruido.