Como era de esperar han sido muchos los que hoy han puesto el despertador bien temprano. La cita lo requería. Después de casi 50 días, se puede salir a hacer deporte: correr, andar en bici, un paseo por la playa, un chapuzón en el mar, un pooco de surf, aunqeu no haya olas... Un poco de monte, cerca de casa. DEIA ha salido a las calles y pueblos de Bizkaia para inmortalizar este momento en días de pandemia y confinamiento.
Si eres de los que has aprovechado estas primeras horas para poder practicar un poco de deporte pueden compartir el momento con nosotros y enviarnos tus fotos para inmortalizarlo. Como siempre a nuestro correo electrónico que es: lector @deia.eus
ASÍ HA AMANECIDO BILBAO
En el caso de Bilbao, la ciudad ha amanecido hoy con muchos corredores en el primer día de en el que se permite hacer deporte, pero sin monte, tras haberlo decidido anoche la policía municipal.
Cuando ha empezado el permiso para correr y pasear, a las seis de la mañana, todavía era de noche y muy pocos pisaban las calles. Ha sido al amanecer, pasadas las seis y media, cuando han empezado a salir los primeros corredores, bastantes más que paseantes.
Les esperaba un día bonito, con quince grados y el cielo limpio de contaminación.
Una hora, después sobre las ocho, las dos orillas de la ría, las dos zonas más habituales de paseos y carreras, ya estaban ocupadas por docenas de personas, aunque todavía se podía mantener bien las distancia de seguridad de dos metros.
Había muchos corredores, bastantes caminantes y algunos ciclistas. Lo que no hay son montañeros: anoche, la policía municipal, tras una reunión mantenida con la Ertzaintza, decidió que, de momento, en el término municipal de Bilbao, el senderismo se tendrá que acoger a la normativa de los paseos.
EL MONTE QUEDA LEJOS
Es decir, a un kilómetro desde el domicilio habitual, por lo que no se podrá subir al monte. La policía municipal comunicó esta decisión con un tuit a última hora, por lo que esta mañana mucha gente se ha dirigido sin conocer esta prohibición hacia Pagasarri y Artxanda, los dos montes preferidos de los bilbaínos para el esparcimiento. Finalmente se ha levantado la prohibición.
POR LAS DOS MÁRGENES DE LA RÍA
Con todo, miles de bilbainos abarrotaban minutos antes de las diez de esta mañana ambas márgenes de la ría aprovechando las primeras horas autorizadas para pasear y realizar actividad física individual, aprovechando un sábado soleado y con una temperatura en torno a los 20 grados centígrados.
Tanto el paseo del Campo Volantín como los alrededores del Museo Guggenheim, zonas habituales de paseo de los bilbaínos, aglutinaban a paseantes y corredores, a los que se sumaban gente paseando con perros y ciclistas, lo que imposibilitaba en muchos casos mantener la distancia de seguridad aconsejada por las autoridades sanitarias.
Se da la circunstancia de que solo una mínima parte de las gente que circulaba por la calle a esas horas empleaba mascarilla facial, elemento que dificulta la respiración al hacer ejercicio de alta intensidad.
