Bilbao - Los vagones de tren han sido siempre un espacio de conversación, de intercambio de experiencias e historias. La asociación de mujeres emprendedoras EmakumeEkin ha querido recuperar ese espíritu para sus jornadas anuales de trabajo, en las que reúnen a sus asociadas para compartir experiencias y fomentar la colaboración. “El vagón es también un símbolo de la asociación, que es un punto de encuentro, un viaje compartido entre mujeres y sus empresas, con muchas cosas que aprender y compartir entre sí”, reconoce su presidenta, Susana Zaballa.

La asociación de mujeres ha organizado este año, por tercera edición, su particular neskworking, un juego de palabras entre neska (chica) y networking (red profesional). La idea es juntar a mujeres emprendedoras y que trabajan por su cuenta para tejer nuevas redes entre ellas y conocer experiencias profesionales de primera mano. “Este tipo de eventos pretende ser un paso decisivo para ampliar red, ya que los negocios necesitan encontrar partners y contactos en otros lugares para ofrecer un mejor servicio. Entablar conversaciones entre emprendedoras de distintos territorio amplía la mirada y abre puertas estratégicas”, explica Zaballa. Más de cuarenta mujeres partieron de la estación de Atxuri, con destino a Donostia. Siempre se eligen escenarios singulares. En ediciones anteriores el evento se ha celebrado en Bilborock y el Museo de Reproducciones Artísticas. Poetas, youtubers, expertas en marketing digital, sumilleres, coaches, consultoras financieras, propietarias de tiendas de ropa... Emprendedoras de diferentes perfiles, de diferentes edades y experiencias variadas, se subieron a un mismo tren el hace unos días. A bordo compartieron entre ellas sus experiencias, sus miedos y logros, y, lo más importante, se conocieron entre ellas, un paso clave para poder colaborar y trabajar juntas. En grupos de cuatro, aprovechando los asientos de los vagones, intercambiaron tarjetas y plantearon diferentes situaciones, por ejemplo, los obstáculos a los que se enfrentan en sus empresas para escuchar los consejos y opiniones de sus compañeras. Tres mujeres relataron, además, su trayectoria empresarial. Alba Donadeu, una de las socias fundadoras de la cerveza artesana Boga Garagardoa, con sede en Mungia, fue una de ellas. “Es una jornada muy interesante y divertida, que siempre me reservo para mí. Te permite conocer a nuevas personas que te aportan muchas cosas en diferentes ámbitos”, afirma. En su ponencia, en la que relató su propia experiencia al frente de la fábrica, trató de reflejar una convicción que, en su opinión, es fundamental a la hora de poner en marcha un proyecto. “Te lo tienes que creer. Si crees que tienes un buen proyecto, sigue adelante, porque, aunque hay muchas trabas, con esfuerzo, perseverancia y dedicación las puedes superar. No te creas que es imposible o que no es para ti; no te pongas tus propias barreras antes de salir al mercado”, defiende.