Gorliz - Gorliz ha borrado la huella franquista que aún quedaba marcada en algunos de los portales de la localidad. A día de hoy, ninguna de las treinta comunidades de vecinos que mantenían las denominadas placas con el símbolo falangista del Ministerio de Vivienda las conserva. Y es que el equipo de gobierno comenzó en noviembre de 2013 con esta labor de hacer desaparecer la simbología franquista de Gorliz y, después de meses de insistencia, todos los portales la han eliminado.
Este hecho se produce coincidiendo con la denuncia que Eduardo Ranz, abogado especializado en Derechos Humanos, presentó ayer -día del 142 aniversario de la Primera República- contra 38 alcaldes de todo el Estado por un presunto delito de desobediencia por mantener los símbolos franquistas en sus ciudades a pesar de la ley de Memoria Histórica. El concejal gorliztarra Asier García se empecinó, a finales de 2013, en conseguir que los portales que todavía contaban con la antigua placa del Ministerio de Vivienda de la época de Franco se deshicieran de ella. El propio edil recorrió las calles del municipio para comprobar cuántos bloques de viviendas tenían el distintivo en su entrada y detectó que eran una treintena.
Por ello, el Consistorio envió una carta -firmada por la alcaldesa, Arantza Etxebarria- a todas esas comunidades de propietarios aconsejando la retirada de esas placas, ya que “en este Ayuntamiento reside un interés especial en eliminar cualquier vestigio que pudiera recordar épocas políticas pasadas causantes de sufrimiento y dolor entre la población”.
El Ayuntamiento, asimismo, se ofreció a realizar las labores de retirada de estos elementos si las comunidades de vecinos tenían dificultades para hacerlo por ellas mismas.
Finalmente, a lo largo de más de un año, los propietarios han ido, poco a poco, deshaciéndose de esta marca de la dictadura. Se trata de unas placas cuya colocación era obligatoria en el pasado y significaba un control por parte de la administración franquista y, a su vez, facilitaba la propaganda oficial del régimen dictatorial. El concejal gorliztarra ya ha notificado a la consejería de Interior del Gobierno vasco la desaparición de todos estos vestigios del pasado.