El Dziki Varsovia polaco ha anunciado este martes a través de sus redes sociales la incorporación a sus filas de Denzel Andersson, que pone fin a dos temporadas en las filas del Surne Bilbao Basket. De esta manera, el ala-pívot sueco regresa a la competición de la que fue captado por la entidad de Miribilla durante el verano de 2022, concretamente del Stal Ostrow.

En sus dos campañas como hombre de negro, Andersson ha ofrecido un rendimiento en retaguardia más que notable. Sin embargo, no ha acabado de explotar en la faceta ofensiva. Llegó con la vitola de cuatro abierto, pero su nivel de acierto desde la línea de 6,75 no ha sido el esperado. El pasado verano fue renovado pensando que en su segundo curso, una vez adaptado a la exigencia de la Liga Endesa, iba a ser capaz de dar un paso al frente en el tiro exterior que, sin embargo, no ha llegado. En la competición doméstica no ha pasado de los 4,2 puntos de media con un 30,8% desde más allá de la línea de 6,75.

El contrato de Andersson incluía una cláusula de corte que el conjunto vizcaino ha decidido ejecutar este verano. Las declaraciones de Jaume Ponsarnau y Rafa Pueyo, director deportivo, ya dejaban entrever al finalizar el anterior ejercicio que era algo que podía ocurrir si el mercado ofrecía a buen precio un jugador más apetecible que el sueco, algo que ocurrió cuando en el punto de mira apareció Tomasz Gielo, ala-pívot polaco con gran experiencia en la Liga Endesa cuya incorporación por una temporada procedente del Stal Ostrow de su país, al igual que Andersson en su día, está ya firmada, a falta de darse a conocer de manera oficial.

Buen papel

Tras dos temporadas como hombre de negro que en líneas generales dejan un buen sabor de boca, Andersson continuará a sus 27 años su carrera profesional en un Dziki Varsovia que la pasada temporada acabó la liga polaca en décima posición.