La ACB o la LEB en cuarenta minutos, o los que hagan falta. Esto es lo que se decide hoy en Miribilla donde el Bilbao Basket juega ante el Joventut el último partido de la temporada y el más decisivo. "Hace un mes y medio estábamos naufragados, pero aún no hemos hecho nada, solo tenemos opciones", recordó ayer Álex Mumbrú antes de una cita de las que quiere afrontar cualquier deportista. Por eso, el técnico de los hombres de negro advirtió, desde su experiencia y desde experiencias ajenas muy recientes, del peligro de la euforia "que no es buena ni positiva porque te puede generar frustración durante el partido. La euforia hay que tenerla cuando consigues algo, no antes".

La iniciativa ha ido cambiando de lado esta semana. El Bilbao Basket se le pasó al Estudiantes con su triunfo ante el Burgos y luego la perdió con la derrota ante el Real Madrid, "que supongo que a ellos les alegraría". Tras la derrota de los colegiales el viernes, el destino está en manos bilbainas, pero eso no significa nada ya que "jugar este tipo de partidos siempre es complicado. Tenemos que preocuparnos de hacer nuestras cosas y jugar bien al baloncesto". La situación de la Penya, con el séptimo puesto asegurado y la cercanía de un play-off ante el Barcelona, tampoco tranquiliza a Mumbrú, que recordó que los verdinegros "son un gran equipo, juegan muy bien y han ganado cuatro de los cinco últimos partidos y el que han perdido lo han hecho en la prórroga".

Desde el máximo respeto a la calidad del rival, el entrenador del Bilbao Basket mostró "plena confianza" a sus jugadores. "Pese a todo, se han ganado la posibilidad de llegar a este partido y no hace falta mucha motivación", indicó. El trabajo defensivo será fundamental ante un rival que ejecuta muy bien las situaciones de bloqueo y continuación y últimamente está lanzando a canasta con muy buenos porcentajes hasta promediar más de 86 puntos por partido, una cifra solo al alcance de un Bilbao Basket tan acertado como el pasado martes ante el Burgos. "Más que de controlar los nervios se trata de reducir los errores", añadió Mumbrú. Aún ayer, John Jenkins acusaba los efectos del fuerte golpe en la ceja que sufrió ante el Real Madrid y que le provoca episodios de mareo, pero el principal referente anotador del perímetro bilbaino estará disponible, salvo sorpresa mayúscula.

El Joventut, presidido por el bilbaino Juanan Morales, no puede progresar en la clasificación, pero quiere "acabar con las mejores sensaciones para llegar bien al play-off", según Carles Duran, que fue entrenador del Bilbao Basket entre junio de 2016 y noviembre de 2017. El técnico de Villasar de Mar señaló que su equipo "debe plantearse pequeños objetivos, como lograr mejor balance en la segunda vuelta que en la primera" para afrontar el partido con la máxima seriedad y tensión. Simon BIrgander, que se hizo un esguince el miércoles, será baja, mientras que vuelven a la lista Xabi López-Arostegui y Pep Busquets, que estaba cedido en el Girona de la LEB Oro. "El Bilbao Basket tiene excelentes jugadores, muchos anotadores y ha podido encontrar el equilibrio porque se nota mucho la presencia de Balvin", comentó Duran.