Si el final de temporada del Bilbao Basket se había vuelto muy complicado en sus aspiraciones de lograr la permanencia, el covid ha añadido aún más dificultad. El club anunció ayer que dos miembros de la plantilla, cuya identidad no ha trascendido, dieron positivo en las pruebas realizadas al regreso de Tenerife, donde jugaron el miércoles, y antes de enfrentarse mañana contra el Valencia Basket. Eso obligó a aislar a los afectados y al resto del equipo, de hecho se suspendió la rueda de prensa previa de Álex Mumbrú, hasta que pasara durante el día de ayer los llamados PCR de respaldo. Estos resultados se confirmarán hoy, pero si una persona más, sea técnico, jugador o auxiliar, da positivo, se considerará un brote y el partido de mañana quedará aplazado y todos tendrán que quedar confinados hasta que las sucesivas pruebas desvelen que el brote ha remitido y pueden volver a la actividad.El duelo de la Fonteta entraña mucha dificultad, aumentada por la posibilidad de que el técnico no pueda contar con estos dos jugadores positivos. Además, hay que recordar que Jaylon Brown se lastimó el tobillo en Tenerife y quizás tampoco esté en buenas condiciones. El posible aplazamiento del duelo ante el Valencia comprimiría aún más el calendario ya que quizás llevaría a suspender también los dos de la semana que viene ante el Gran Canaria y el Burgos, como le ha ocurrido al Baskonia tras detectar otro brote en sus filas. También está pendiente el choque entre el Bilbao Basket y el Fuenlabrada, suspendido hace once días por cuatro positivos en el equipo madrileño, que ya esta jornada podrá jugar ante el Real Madrid.

un final al esprint

Ahora mismo, hay seis encuentros aplazados en la Liga Endesa por culpa del coronavirus, tres de ellos del Morabanc Andorra, y cualquier otra incidencia podría montar un enredo importante. En el peor de los casos, los hombres de negro podrían encontrarse con el escenario de tener que disputar seis partidos en dos semanas ya que el final de la liga regular está previsto con dos jornadas unificadas el 13 y el 16 de mayo. Y también hay que tener en cuenta cómo afecte el virus a los dos jugadores que han dado positivo, si simplemente son asintomáticos o el covid ha atacado de forma más severa a su organismo.

Por el curso de los acontecimientos, cabe deducir que el contagio se ha producido en el viaje a Canarias ya que para ese partido todas las pruebas realizadas, incluida la del recién llegado Ioannis Athinaiou, fueron negativas. Al menos, en este tramo final el Bilbao Basket no se va a mover mucho de Miribilla ya que solo le quedan dos viajes a Valencia y Madrid. Por eso, los cuatro partidos de casa estaban señalados como claves para asegurar la salvación tras esta campaña en la que todo lo que ha podido salir mal ha salido mal y ha añadido aún más incertidumbre al tramo final.

Se aplaza el inicio del ‘play-off’’. Ninguna competición se está librando del covid-19 y el Zornotza, que ha sufrido el azote del virus en un par de ocasiones esta temporada y ha tenido que recuperar partidos sobre la marcha, se ha vuelto a ver afectado por los positivos detectados en el Pardinyes, el rival con el que debía empezar mañana el play-off de ascenso. El conjunto ilerdense comunicó ayer la aparición de un positivo en su plantilla y como los protocolos marcados por la FEB son distintos, todo el equipo se ha tenido que confinar y el encuentro ha sido aplazado sin fecha. El duelo de vuelta debía celebrarse el próximo fin de semana, pero también queda a la espera de que el Pardinyes recupere la normalidad. En este contexto, Mikel Garitaonandia, técnico del Zornotza, habló en sus redes sociales de “la necesidad de adaptarse a las circunstancias”.