El verano ha tocado ya a su fin y con la llegada del otoño empiezan los cambios propios de esta estación. El descenso de las temperaturas, la vuelta a la rutina o la disminución de las horas de sol pueden provocar cierto desequilibrio físico y emocional, un fenómeno popularmente conocido como astenia otoñal.
A grandes rasgos, se trata de un periodo en el que el organismo debe adaptarse a los cambios estacionales por lo que las personas se pueden sentir más cansadas, desanimadas e incluso con dificultades para conciliar el sueño. Este trastorno es generalmente leve y se puede considerar un estado de ánimo pasajero que no debe durar más de un mes.
La falta de luz del sol hace que tu cuerpo produzca menos serotonina (hormona del bienestar) y más melatonina (la hormona del sueño) lo que te provoca ese bajón otoñal.
Para hacer frente a esta situación, cada vez es más común recurrir a la aromaterapia, una disciplina basada en los beneficios que aportan los aceites esenciales.
Así pues, la aromaterapia ayuda a encontrar el bienestar y a estabilizar emociones a través de las propiedades que proporcionan los aceites esenciales naturales. Actualmente, las formas más comunes de su aplicación son mediante difusor o aplicándolos directamente sobre la piel diluidos en forma de aceite vegetal.
En este sentido, lo más importante es recurrir a aceites esenciales 100% puros y naturales. En concreto, los expertos recomiendan optar por aceites quimiotipados y aptos para veganos, lo que garantizará la calidad del producto. Alex Zendrera, general manager de la marca de aromaterapia Sisen Oil Essentials, afirma que “para que un aceite esencial sea de alta calidad y tenga grado terapéutico que aporte bienestar es muy importante que no esté cortado ni mezclado con otras sustancias, sino que debe ser realmente 100% natural”.
¿Cómo ayudan los aceites esenciales?
Los aceites esenciales se han convertido en un elemento ideal para ayudar a las personas a alcanzar el bienestar físico y emocional. Sin embargo, existen muchos tipos de aceites y mezclas esenciales elaboradas con un fin u otro. A continuación, expertos de Sisen Oil Essentials muestran los principales beneficios de la aromaterapia que te pueden ayudar a lidiar con el inicio del otoño:
- Para relajarse y conciliar el sueño. Aceites a base de sándalo, mandarina o ylang ylang (flor de cananga) forman una combinación perfecta para bajar el ritmo y ayudar a conciliar el sueño. Antes de ir a dormir, colócalo en un difusor en tu habitación o aplícatelo con un suave masaje con un roll-on en las sienes, cuello, muñecas o plantas de los pies.
- Para lograr un plus de energía. La combinación de cítricos funciona muy bien para reactivar la energía y promover la creatividad. Este tipo de esencias son especialmente revitalizantes y son ideales para aumentar la productividad en el ámbito laboral o en casa.
- Para encontrar el equilibrio y combatir la ansiedad. El cambio estacional también puede influir en el nivel de estrés, por lo que los aceites de incienso, bergamota o lavanda son una combinación perfecta que ayudan a encontrar el equilibrio y combatir la ansiedad. “Para disfrutar de sus beneficios es especialmente útil un aceite esencial de este tipo cuando se aplica en roll-on directamente en muñecas, sienes o cuello”, afirman los expertos de la compañía especializada en aromaterapia.
Cómo paliar la astenia
- Practica ejercicio. Pilates, yoga, natación, montar en bici o pasear media hora al día te harán sentirte mejor.
- Evita escenarios de estrés. Las situaciones de nervios pueden afectar a unas defensas ya bajas de por sí por la llegada del otoño.
- Intenta ser positivo. Date un tiempo para volver a la rutina y no quieras retomar todas las actividades de golpe.
- Descansa y reajusta tu reloj interno. Acuéstate pronto y duerme las horas suficientes para volver a la rutina con tranquilidad y horarios estables.
- Mantén una alimentación equilibrada. Un menú basado en la dieta mediterránea favorecerá tu bienestar tanto físico como mental.
- Toma el sol diez minutos al día. Te ayudará a cargarte de energía.
- Protégete del frío. El descenso de temperaturas puede provocar una bajada de defensas así como resfriados y gripes. Abrígate para plantarle cara al frío.
