El Athletic se reencontró con la victoria en liga tres jornadas después en el esperado debut de Maroan Sannadi, quien ilusionó en sus primeros minutos como león tras sustituir a Gorka Guruzeta en el minuto 65 en medio de una gran ovación. La respuesta del delantero no pudo ser más convincente, pues lejos de verse condicionado por los nervios del estreno, Maroan, con el dorsal 21 a la espalda y las medias bajadas, tiró de personalidad y atrevimiento para provocar un sinfín de problemas a la defensa del Girona.
Solo en el primer intento de control erró el punta, que se mostró imponente en cada acción en la que intervino. Y no fueron pocas, pues su impacto en el juego fue mayúsculo durante treinta largos minutos en los que ni los centrocampistas de contención, ni los centrales del Girona encontraron la manera de frenarle. No le hizo falta marcar a Maroan para cuajar una extraordinaria actuación que pudo incluso rubricar con una asistencia de gol, pues en su primer destello del partido recibió de espaldas y habilitó en la carrera a un desatado Oihan Sancet que no pudo hacer el 3-0 en el minuto 70.
Lo lograría después el de Mendillorri, quien agradeció aun así la meritoria acción de su nuevo compañero, que exhibió una potencia descomunal para zafarse de la práctica totalidad de rivales que chocaron contra él. Demostró también una buena técnica el ariete, que forzó dos tarjetas amarillas y en otra de sus arrancadas tiró un taconazo para sortear a su par, ganar posición de disparo y probar a Paulo Gazzaniga desde la frontal del área.
Sueño cumplido
Al término del partido, Maroan aseguró que con su debut como león “he cumplido un sueño y voy a seguir trabajando para tener más oportunidades”. “Cuando Valverde me ha llamado para entrar al campo me ha pasado toda mi vida por delante. Es una sensación indescriptible, porque llevaba toda mi vida esperando una situación así, pero una vez entras en el campo te olvidas de todo”, remarcó asimismo el punta, quien confesó que “no he sido consciente de lo que gritaba la gente, pero me he sentido cómodo, aunque tenía las revoluciones un poco altas y a medida que avancen los partidos irá mejor”.
“Esto es lo mínimo que van a ver de mí, porque voy a dar lo máximo en cada jugada y me voy a matar por esta camiseta”, advirtió Maroan, quien apuntó con sumo orgullo que “del debut me quedo con el detalle que ha tenido De Marcos conmigo, porque me ha regalado su brazalete de capitán con la fecha de este partido. Es algo que voy a recordar siempre”. Valverde, por su parte, señaló respecto al punta que “nosotros le vemos entrenar y ya vemos que nos puede aportar cosas. Con los jugadores que debutan siempre se generan unas expectativas que hay que asentar después, pero ha dado el primer paso y estamos contentos con él. Ha estado participativo, se ha atrevido con jugadas y es muy fuerte para aguantar las embestidas de los rivales”.