El Athletic que viene

Nacido en Madrid pero criado desde los tres meses en Basauri, Djaló se formó futbolísticamente en las filas del San Miguel y el Begoña, clubes que recibirán un buen pellizco económico por los derechos de formación, y emprendió la aventura portuguesa en el verano de 2017, cuando entró en la cantera del Braga tras probar fortuna también en el Benfica. Su familia es natural de Guinea-Bissau y es primo de Malcom Adu Ares, con quien competirá a partir de la próxima temporada por un puesto en el once titular del Athletic.

La apuesta por el atacante, aseguran desde la entidad, supone un salto de calidad grande para la plantilla y recalcan que el objetivo es mantener el bloque. Se trata, pues, de un mensaje ambicioso para afrontar una próxima campaña en la que si nada se tuerce, el conjunto rojiblanco volverá a competir en Europa, pues a día de hoy, con once jornadas por disputarse, aventaja en ocho y diez puntos, a Betis y Real Sociedad, respectivamente. Además, tiene abierta la vía de Copa, pues si gana al Mallorca en la final del próximo 6 de abril tendrá plaza garantizada para jugar la Europa League.

Quienes han seguido su evolución en los últimos años destacan la polivalencia como una de las grandes virtudes de Djaló, que puede actuar en cualquiera de los dos extremos, la media punta o como nueve. Las fuentes consultadas dicen que guarda ciertas similitudes en su juego a Guruzeta por la facilidad que tiene para asociarse en zonas intermedias, aunque su punta de velocidad y su buen golpeo de balón también hace que marque diferencias jugando en banda. En definitiva, el Athletic se ha hecho con un futbolista que en temporada y media en el Braga ha marcado 19 goles y repartido 9 asistencias, que cuenta con experiencia continental, pues ha participado en las tres competiciones, y que elevará la competitividad interna.

PRESENTE Y FUTURO

A la espera de ver qué sucede con Alex Berenguer, que tiene sobre la mesa una segunda oferta de renovación, superior a la primera, tal y como informó ayer Onda Vasca, y que supera las que ha recibido de otros clubes, pues acaba contrato el próximo mes de junio, el Athletic tiene atada su delantera a corto, medio y largo plazo gracias a varias renovaciones llevadas a cabo por el club en los últimos meses.

Nico Williams, tras meses de contactos, amplió su vinculación con la entidad hasta 2027, como Adu Ares. El contrato de su hermano Iñaki finaliza en 2028 después de que Aitor Elizegi le ampliará por tres cursos más el anterior y Gorka Guruzeta también se comprometió hace pocas fechas hasta esa misma temporada. Djaló llegará en verano con ficha hasta 2029 y Oihan Sancet cuenta con la vinculación más larga de la plantilla, hasta 2032. Además, Asier Villalibre tiene contrato en vigor por una campaña más.

GOROSABEL, EL PRÓXIMO

La contratación de Álvaro Djaló no es la única que está cerrada por parte del Athletic, pues la dirección deportiva que lidera Mikel González lleva tiempo trabajando en atar a Andoni Gorosabel, lateral del Alavés que se formó en Zubieta y que llegó a jugar la Champions con la Real Sociedad. Su contratación, a coste cero, pues el pasado verano firmó por una única campaña con el conjunto babazorro, se da por hecha, aunque es razonable que desde Ibaigane aguarden a la conclusión de la temporada para hacerlo oficial, tal y como hicieron con Iñigo Ruiz de Galarreta.

Así las cosas, se entiende que los esfuerzos de la dirección deportiva se centrarán a partir de ahora en tratar de reforzar al equipo con la llegada de un central. A día de hoy son tres las piezas con las que cuenta Ernesto Valverde y si como todo hace indicar el equipo juega en Europa la próxima campaña, se antoja necesaria la llegada de un cuarto central.