Bilbao - Oihan Hernández (Iruñea, 2000) es una de las sensaciones de este comienzo de temporada en el Bilbao Athletic que se encuentra clasificado como segundo en el grupo vasco de Segunda División B. El joven centrocampista rojiblanco jugó con el primer equipo 35 minutos en la primera jornada frente al Barcelona en San Mamés y después volvió al conjunto filial donde empieza a marcar registros importantes. Junto al delantero de Osasuna Promesas Barbero lidera la tabla de realizadores con cinco dianas, algo inusual en los cachorros, que suelen aglutinar habitualmente sus goles en el delantero centro. Puede ser por las lesiones de Ewan y Tascón que ha propiciado que Joseba Etxeberria se haya decantado en su esquema por un falso nueve como es Iñigo Baqué (defensa o centrocampista normalmente); el caso es que esta situación ha propiciado el derroche goleador de este todoterreno, box to box, que media entre las dos áreas, llamado Oihan Sancet y que ha mostrado además un gran descaro en su juego, quizá extraño para su juventud.

Gaizka Garitano habrá tomado nota y seguramente no le va a faltar pronto una nueva oportunidad en la primera plantilla rojiblanca. Pero la posición habitual de Sancet es muy similar a la de Raúl García, hasta ahora uno de los intocables para el entrenador de Derio. Así que o prescinde o cambia a Raúl García de la media punta o Sancet debería alterar su estado natural, algo que parece ilógico cuando se trata de una nueva apuesta que podría dar aire nuevo al Athletic y qué mejor que jugar donde él sabe mejor hacerlo.

Los números del centrocampista están ahí. Parece que está pidiendo a gritos el ascenso de categoría, teniendo en cuenta además que se saltó la lección del Basconia en Tercera División. En el comienzo de liga en casa del Haro (1-4) y en Lezama contra el Calahorra (0-0) jugó todos los minutos aunque no consiguió marcar. En León, los bilbainos fueron zarandeados por la Cultural (5-2) y los dos tantos fueron logrados por Sancet. De muy bella factura, por cierto. En el 4-0 ante en Salamanca en Lezama el último tanto conseguido en la prolongación fue obra del de Nafarroa. En el 0-3 en casa del Tudelano no marcó y, finalmente, el pasado sábado, en una nueva goleada en casa contra el Osasuna Promesas (5-0) vio puerta en dos ocasiones. Otros dos golazos. Son un total de cinco goles en seis jornadas para un centrocampista de segunda línea al que le gusta aparecer cerca del área.