ER conscientes de la "situación de vulnerabilidad" que se vivía en muchas familias fue el punto de partida de Elkarbanatuz, una entidad, ligada a La Salle, que logró "identidad propia" a finales de los años 90 tras mucho tiempo colaborando con asociaciones de proximidad. Con sede en Bilbao y ramificaciones en Gipuzkoa y Zaragoza, Elkarbanatuz apuesta por ofrecer una "mirada socioeducativa y de inclusión socio-laboral". Desde el centro de Bilbao fijan su trabajo en el Distrito 1 de la capital vizcaina dando servicio a vecinos de los barrios de Deusto, San Ignacio, Arangoiti y Elorrieta.

Hasta Elkarbanatuz llegan personas procedentes de las diferentes instituciones que necesitan un apoyo para salir adelante. "Tenemos cuatro áreas de trabajo", explica Borja Doval, director de la entidad. La primera de ellas se ciñe a la "parte más estructural". El área de formación laboral ocupacional se ocupa de ofrecer "programas de formación para el empleo" y de "habilidades básicas para personas en un proceso de inclusión social". Otro de los ejes se centra en el "servicio psicosocial con personas en situación de riesgo de exclusión social". El cuarto área está dedicado a "infancia, familia y seguimiento social". Toda la labor se puede llevar a cabo gracias a un gran equipo y a voluntarios, muchos de los cuales llegan a través de una asignatura que se desarrolla en el propio centro educativo. "Se acercan a la labor social y muchos se enganchan", cuenta Doval mientras que Itxaso Bilbao, responsable del área de infancia, familia y seguimiento social, apunta que muchas veces ocurre que "viene uno y dice: ¿yo dar clases? Y es lo que mejor se le da y está súper a gusto".

En la atención a los más pequeños se apuesta por la cercanía. "La idea es atender a gente que sea de un entorno cercano porque la mayoría son familias monomarentales y que sean de fuera supone un gasto, hay que atender a hermanos...", explica Itxaso Bilbao. La pandemia ha puesto de manifiesto las brechas que existen en la educación y a través del programa Aukerak suspertzen han podido reforzar ese nicho que se creó. "Cuando se volvió a las aulas, cuando terminaban las clases se usaban las aulas para el refuerzo", apunta la responsable del área de infancia, familia y seguimiento social.

Una de las líneas de actuación es la formación profesional para el empleo. Foto: Elkarbanatuz

Otra de las consecuencias de la actual situación sanitaria se ha reflejado en que aunque "se ha primado el contacto humano", este no siempre ha sido posible. "Lo estamos retomando", cuenta Bilbao. "El año pasado no paramos nada pero tuvimos que adaptar nuestra intervención", detalla Doval, quien pone de manifiesto que "lo virtual se ha incorporado a la parte presencial". De hecho, en formación para el empleo uno de los primeros conocimientos que adquieren es "cómo funciona el Classroom, la plataforma. Es algo que les va a servir para su vida".

La relación con los servicios sociales de base es muy estrecha para poder desarrollar la labor de Elkarbanatuz y se realiza un "trabajo preventivo y de detección" de necesidades. "La mayoría de las familias, por suerte, hacen un proceso educativo con nosotros de tres, cuatro años. Y unas pocas, por desgracia, terminan en un proceso institucionalizado porque la situación es más grave", subraya Bilbao.

En estas más de dos décadas de trayectoria han visto cómo cambiaban las necesidades. "Antes hablábamos con personas con una situación determinada. Ahora es más multiproblemática, los visulizamos con más claridad", subraya Doval quien destaca la "salud mental" como uno de los factores. "La soledad la identificamos con las personas mayores pero está presente en jóvenes y menores, que aunque estén con sus familias, viven en soledad", ahonda el director de Elkarbanatuz.

Y de cara al futuro solo tienen un deseo, que comparten Borja e Itxaso: "necesitamos el apoyo de la administración y que reconozca las necesidades que hay". Unas necesidades que se mantienen patentes y a las que hay que darle una respuesta para que nadie se quede por el camino.

Sexta edición. Los BBK DEIA Elkartasun Sariak reconocen un año más la labor desinteresada de las entidades sociales de diferentes ámbitos de Bizkaia, que trabajan por ayudar a personas con diferentes problemáticas.

Premiados. Los galardonados de esta sexta edición son: Fundación Fidias, Hazsten, Asociación Margotu, Fundación Etorkintza, Gorabide y Elkarbanatuz.

15 de junio. La entrega de premios se celebrará este martes 15 de junio en el Auditorio del Museo Guggenheim. Además, el evento se podrá seguir en directo a través de la página web deia.eus.

"La soledad se identifica con los mayores pero también la estamos detectando en jóvenes y menores"

Director de Elkarbanatuz

"Atendemos a la gente del entorno más cercano para que sea más sencillo compaginarlo"

Responsable del área de infancia, familia y seguimiento social