Donostia - El conflicto en la educación concertada perdió ayer su oportunidad de alcanzar un acuerdo. La reunión convocada por la patronal mayoritaria del sector, Kristau Eskola, fue “muy decepcionante”, según valoraron los sindicatos que mantendrán la huelga para los días 1, 2, 3 y 4 de abril si durante esta semana no se dan “grandes modificaciones”. Y no parece que se vayan a producir, puesto que Kristau Eskola aseguró que es “inviable sumar ninguna mejora más a la propuesta definitiva”.

Las familias de más de 107.000 alumnos vascos de Infantil, Primaria, Secundaria y Bachillerato tenían puestas sus esperanzas en esta convocatoria. Patronal y sindicatos se reunían por primera vez desde el 11 de enero, después de que el conflicto se estancara durante más de dos meses. Tras más de dos horas de encuentro en la sede de Kristau Eskola en Donostia, las primeras valoraciones dejaron claro que la situación estaba muy lejos de solucionarse. El acuerdo “no está cerca”, señaló la representante de ELA Miren Zubizarreta una vez terminada la reunión. “Ha sido muy decepcionante. Han venido con una propuesta que en algunos aspectos incluso empeora la oferta que nos hicieron en Navidad”, agregó Julen Llanos, de Comisiones Obreras. Así, ELA, CC.OO., Steilas, LAB y UGT animaron en un comunicado conjunto a los trabajadores del sector a apoyar las próximas convocatorias de huelga, que se sumarán a las 21 que ya han celebrado en un año, 18 en el presente curso. “No ha habido avances significativos que atiendan a las demandas de la plantilla, que lleva diez años sin renovar el convenio”, afirmaron los sindicatos, que también criticaron al Departamento de Educación por “no asumir su responsabilidad en este conflicto”, por “no implicarse ni tomar parte activa para la resolución satisfactoria del mismo”.

“Sin modificaciones sustanciales” La propuesta de la parte empresarial, que estuvo representada por Agustín Eizagirre, “apenas” tiene “modificaciones sustanciales ni avances” respecto a lo que ya se planteó antes de las huelgas de marzo, insistió Zubizarreta, quien aseguró que “están obcecados en hacer determinados planteamientos”. En este sentido, Julen Llanos puso como ejemplo ligar el establecimiento de salarios a la financiación por parte del Gobierno vasco y, además, hacerlo durante cuatro años, hasta 2023, cuando “antes hablaban de 2021”.

“Kristau Eskola sigue intentando cruzar líneas rojas que desde hace mucho tiempo los sindicatos le hemos dicho que no vamos a cruzar. Ha habido mucha voluntad de todas las organizaciones allí sentadas de intentar facilitar un acuerdo, pero ha sido solo por nuestra parte. La patronal no ha mostrado ninguna voluntad de recapacitar sobre varias cuestiones”, criticó Llanos, quien insistió en que las propuestas de Kristau Eskola “van en la línea de anular la negociación colectiva sobre la capacidad que tienen los trabajadores de decidir sobre sus salarios. Con estos mimbres la huelga se mantiene”, subrayó Zubizarreta.

Una mejora es “inviable” Los sindicatos preguntaron a la patronal si todavía existía la posibilidad de limar la propuesta, de recapacitar sobre ella, pero no parece que esto se vaya a producir. “Nos han dicho claramente que esta es la propuesta que es”, indicó Llanos. Y no es aceptable para las organizaciones.

Kristau Eskola tampoco está dispuesta a realizar otras modificaciones, puesto que es “del todo inviable sumar ninguna mejora más a la propuesta definitiva” presentada en la reunión. En este sentido, propone unas tablas salariales para el personal docente que consisten en el pago delegado más el 0,5% para los años 2017, 2018 y 2019, de manera que los salarios de los profesores de Infantil y Primaria se verían incrementados en un 4,22% respecto al convenio de 2009; los no licenciados del primer ciclo de ESO, en un 4,34% más; los licenciados de este ciclo, en un 12,93% más, y los de segundo ciclo de Secundaria y Bachiller, en un 3,09% más.

Para 2020, 2021, 2022 y 2023 propone aplicar al personal docente y al del primer ciclo de Educación Infantil una paga compensatoria equivalente al 2% del salario base de 2017 y 2018. Además, sugiere una equiparación salarial entre los profesores licenciados de los dos ciclos de la ESO, así como mejoras relativas a la jornada anual y las sustituciones.

Para los sindicatos, la propuesta “queda lejos tanto de la recuperación del poder adquisitivo perdido durante estos años, de IPC más 9,8%, así como de la petición de IPC más 6%”. “Deja en evidencia que las patronales tienen capacidad económica para acordar unos salarios que nos acerquen más a la recuperación del poder adquisitivo en contra de lo que han estado manifestando durante todo el conflicto”, insistieron las organizaciones. Por ello, criticaron el “empecinamiento” que tienen en intentar “obligar a avalar un planteamiento que arrebate a la plantilla del sector la capacidad de negociación colectiva de sus condiciones laborales”.

Los esfuerzos de Kristau Eskola apelando a los sindicatos a que desconvoquen las huelgas programadas para la próxima semana en los centros concertados no parece que vayan a dar sus frutos. Las más de 90.000 familias afectadas se tendrán que enfrentar a otras cuatro jornadas de huelga. “Estamos haciendo todo lo posible por volver a la senda de la negociación”, dijo el director general de Kristau Eskola en un mensaje dirigido a los padres y madres de alumnos.