El PNV trasladó ayer martes su descontento con la ministra de Sanidad, Carolina Darias, al pleno del Senado. Estefanía Beltrán de Heredia le pidió que el Consejo Interterritorial no se convierta en un “caballo de Troya disfrazado de cogobernanza” que vulnere el autogobierno con órdenes de obligatorias tras haberse negado a mantener el estado de alarma. Darias prometió “respeto a las competencias”, aunque no renunció a un marco de actuaciones coordinadas contra el virus. Confió en alcanzar un nuevo acuerdo con las comunidades, pero dejó como recado que es cada vez más difícil. El Gobierno español, ya antes de que la Audiencia Nacional diera la razón a la Comunidad de Madrid e instaurase medidas cautelares contra la orden sobre la hostelería y el ocio nocturno, matizó la declaración del Consejo Interterritorial, que iba a ser obligatoria, y aclaró que lo referido a la hostelería se puede adaptar a la realidad de cada comunidad. Lo avanzó también el ministro Iceta en la entrevista concedida a DEIA.

Beltrán de Heredia recordó la negativa de Darias a prorrogar la alarma y que ahora, cuando las previsiones mejoran, opta por una “utilización perversa del Consejo Interterritorial” e intenta imponer medidas únicas. Recordó la matización de Iceta. “Saludo que haya recapacitado”, dijo, para pedir también que el Gobierno español respete el “ marco competencial” porque, de no ser así, el Consejo “sería un caballo de Troya revestido de cogobernanza y que intenta recentralizar”.

Darias se justificó en que existía ya una declaración de actuaciones coordinadas sin actualizar, y que varias comunidades participaron en un grupo de trabajo para elevar un texto al Consejo. Dijo que desde el fin de semana, y no desde el lunes con la decisión de la Audiencia Nacional, ha tenido “contacto permanente con muchos miembros” del Consejo “buscando un punto de encuentro”. “En esta ministra van a encontrar siempre respeto a las competencias”, aseguró, para matizar que también busca marcos comunes.Beltrán de Heredia se felicitó por esas palabras, y confió en que vuelva a la senda del consenso.

El portavoz del Gobierno vasco, Bingen Zupiria, negó que hayan participado “en ninguna rebelión” o que hayan querido “fomentar polémica”, sino defender su vía, que es la fijada por el LABI y también la única posible ahora que no hay estado de alarma y las competencias son de los presidentes autonómicos.