Bilbao - Jon Iñarritu, diputado de EH Bildu, considera que a tenor de cómo actúan los partidos estatales, en especial el PSOE y Sánchez, estamos abocados a nuevas elecciones.

Vayamos a lo más inmediato, ¿investidura o nuevas elecciones?

-Aunque sea lamentable y un sinsentido, creo que el escenario más probable es que haya elecciones este otoño. Viendo la situación actual y la falta de confianza entre PSOE y Unidas Podemos, todo nos lleva a pensar que el escenario más probable es el de las elecciones. Además, hay que tener en cuenta las presiones de algunos lobbies, la CEOE por ejemplo, pidiendo nuevas elecciones. Y, encima, algunas encuestas dicen que el PSOE saldría beneficiado.

¿Dónde hay que poner la carga de la prueba, en Pedro Sánchez o Pablo Iglesias?

-Hemos visto a Pedro Sánchez diciendo que investidura en julio o elecciones y, a la vez, hemos oído decir a Pablo Iglesias que o hay gente de Unidas Podemos en el Consejo de Ministros o que votarán en contra. Creo que Sánchez, que fue quien ganó las elecciones, tiene la responsabilidad de intentar llevar a buen puerto una negociación. Estos días le hemos visto en Bruselas haciendo incluso gaupasas para elegir a los mandatarios de la UE, pero no hace el mismo esfuerzo con Unidas Podemos. Lo sensato es que se reuniera todo un fin de semana con Pablo Iglesias y los equipos de ambos para llegar a un acuerdo.

¿Sánchez estaría más cómodo gobernando con Ciudadanos (C’s)?

-Creo que tiene la aspiración de gobernar solo, algo complicado con 123 escaños, por eso buscó lo que se ha llamado geometría variable. Por eso ha pasado del con Rivera no al con Rivera no ha sido posible. En un segundo estadio está intentando que Podemos le dé los votos positivos y en tercer lugar hemos visto un intento a la desesperada de una parte del PSOE pidiendo al PP, por responsabilidad de Estado, la abstención. Creo que Sánchez lo intenta con todos porque su verdadero interés es gobernar solo. Y como he dicho antes, juega con el colchón que le ofrecen las encuestas. Bajo mi punto de vista, es kafkiano y un sinsentido que nos lleve a unas nuevas elecciones.

Y la derecha, en este caso Pablo Casado y Albert Rivera, ¿qué papel están jugando?

-Hay una pelea por la hegemonía de la derecha y tanto el PP como C’s quieren ser la fuerza hegemónica ante el Gobierno. Rivera está metido de lleno en esa batalla. Casado también, pero, además, debe recomponer al PP, que se ha quedado en 66 escaños. Esa es su prioridad.

Pedro Sánchez no se ha entrevistado con ustedes. ¿Es menosprecio a EH Bildu o miedo a las críticas que le pueden caer desde la derecha?

-Es más lo segundo, acompañado de una ficción. Es hacer un paripé para simular que el PSOE no habla con EH Bildu cuando todo el mundo sabe, porque es público, que llevamos años reuniéndonos con el PSOE, tanto de manera pública como privada. Ahora bien, el cambio que se producido desde el no es tiempo de vetos de la señora Idoia Mendia o el señor Zapatero diciendo que habría que hablar con EH Bildu, deja en cierto ridículo a Sánchez, que lo que buscaba con esa posición era la abstención de las derechonas, en este caso C’s. Lo que sería sensato es que el PSOE no actuara como en sus tiempos más reaccionarios. Además, no es negativo para EH Bildu que Sánchez no hable con nosotros, es negativo para el PSOE y sus votantes.

Ustedes han dicho que no quieren un gobierno de derechas, pero tampoco darán un cheque en blanco a Sánchez. ¿Es una abstención? ¿Qué peaje cobrarán por su voto?

-Hemos dicho por activa y por pasiva que estamos dispuestos a negociar. No vamos a bloquear, pero tampoco le vamos a regalar un cheque en blanco. También hemos dicho que, si depende de nosotros, la derechona no gobierna. No votaremos desde las tripas sino desde el sentido común. Que no se olvide Sánchez que fue presidente de Gobierno, entre otros, por los votos de EH Bildu en la moción de censura. También hemos dicho que actuaremos de forma conjunta con ERC, con quien hemos firmado un acuerdo de unidad de acción en las instituciones españolas. Esta misma semana hemos mantenido reuniones para ver cómo actuaremos. El escenario está tan abierto que es probable que hasta el último momento no salgamos públicamente a decir cuál será nuestro voto. Veremos lo que ocurre y luego decidiremos.

¿Qué va a suceder en Nafarroa, donde la socialista María Chivite también desdeña a EH Bildu?

-El drama del PSN es que su destino y decisiones no se deciden en la Avenida Sarasate de Iruñea, sino que se toman en Ferraz. Y creo que lo que ocurra en Nafarroa está ligado a lo que ocurra en Madrid. También el paripé de que Chivite no habla con nosotros es algo impuesto por Madrid. Nafarroa es una razón de Estado. Y si no hay cambio de sentido en el Estado, no lo habrá en Nafarroa. Yo aspiro a un gobierno alternativo a las derechonas en Nafarroa, y eso es algo que no se puede conformar excluyendo a EH Bildu.

Volviendo a lo de antes, Sánchez no ha hablado con EH Bildu, pero sí ha recibido a ERC, con quien ustedes han firmado un acuerdo. ¿Es una incongruencia por su parte?

-Dentro de la carrera de ridículos del PSOE, Sánchez hace una apuesta elitista. Solo se reúne con las cuatro grandes formaciones y delega en la señora Lastra las reuniones con las formaciones menores. Insisto en que hace el ridículo cuando todo el mundo sabe que nosotros hablamos con total normalidad con el PSOE. Además, el rey español recibe a todos los grupos que quieran reunirse con él, que no es nuestro caso.

Ha hablado del acuerdo con ERC, ¿por qué no se plasmó en un único grupo en el Congreso?

-El acuerdo, que es público, hablaba de la unidad de acción y no de los grupos parlamentarios, que son instrumentos de trabajo que facilitan la actividad parlamentaria. Tras las elecciones se hizo un análisis de situación tanto en el Congreso como en el Senado y se decidió que se conformara un solo grupo en el Senado. En el Congreso, vista la sobredimensión que representaría ese grupo y que nos facilitaba a nosotros el trabajo dentro del Mixto y a ERC con grupo propio, decidimos no hacerlo. Pero repito, la prioridad es la unidad de acción y no formar un solo grupo. Es cierto que alguna otra formación intentó meternos el dedo en el ojo diciendo que en Catalunya nos habían hecho un feo e incluso que no se querían sacar una foto con nosotros. Y a día de hoy, además del acuerdo con ERC, tenemos una relación cordial y normalizada con todas las fuerzas soberanistas catalanas.

¿Tampoco hubiera servido que ERC le prestara algún diputado?

-Ni lo intentamos sabiendo los precedentes y que en esta legislatura el PSOE amenazó a quien prestara escaños a JxCat que tiene siete diputados. Por contra, el PSOE sí había cedido escaños a Unidas Podemos en el Senado para formar grupo.

¿Dentro del Grupo Mixto se puede defender Euskadi?

-Cada voto vale lo mismo, y en la legislatura anterior, con dos diputados, alguno de los decretos sociales salieron aprobados gracias a nuestros votos. Tener grupo o no es indiferente, lo importante es sumar y, además, ser el altavoz de la sociedad vasca.

¿Entablaron ustedes una competición con el PNV por arrogarse la representatividad y la voz de Euskadi en el Congreso?

-Todas y todos representamos lo que es la sociedad vasca. Ahora bien, al hablar de agenda vasca -que creo que muchos partidos confunden con la agenda de su partido- deberíamos ponernos de acuerdo en que es todo aquello que se aprueba en el Parlamento de Gasteiz y el Parlamento de Iruñea. Lo sensato e inteligente sería defender ese mínimo común denominador como forma de país. Tendríamos que ir a Madrid, a Bruselas y a Estrasburgo de forma conjunta a defender la agenda vasca, que no es otra cosa que lo que defiende la inmensa mayoría de los ciudadanos de este país. Los asuntos de país requieren una defensa unida.

Sintetizando, ¿qué es entonces la agenda vasca?

-Aquello que aprueban los Parlamentos de Iruñea y Gasteiz. Y defendiendo eso, podemos llegar a una relación de bilateralidad entre Euskal Herria y el Estado español. Una apuesta por la bilateralidad para ser tratados de tú a tú.

Diputado, senador y de nuevo diputado. ¿Hay muchas diferencias?

-Las Cámaras son diferentes y el Congreso tiene un mayor eco mediático que el Senado, pero si hay ganas de trabajar, se puede hacer una buena labor en ambas. Además, una de las funciones es la de control del Gobierno y eso es lo que intentamos desde EH Bildu, sea en el Congreso o en el Senado.

“Aunque sea lamentable y un sinsentido, creo que el escenario más probable son nuevas elecciones en otoño”

“Es un paripé simular que el PSOE no habla con EH Bildu cuando llevamos años con reuniones públicas

y también privadas”

“El drama del PSN es que las decisiones que le afectan se toman en Ferraz; lo que ocurra en Nafarroa estará ligado a lo que pase en Madrid”

“Ante los retrasos, decidimos poner sobre la mesa una propuesta de nuevo estatus; no hay ninguna voluntad de provocación en ello”