El actor inglés Sope Dirisu se siente orgulloso por la fidelidad con la que Gangs of London muestra las calles de la ciudad y la multiculturalidad de sus habitantes, porque “rasca sobre la superficie de lo que se conoce de Londres”.

“Es una de las ciudades más diversas en el mundo, no sería justo ni honesto mostrarla como una ciudad de blancos peleando contra blancos, porque generaciones inmigrantes han sido parte fundamental en su funcionamiento, quisimos representar la ciudad de forma correcta”, dice a Efe Dirisu.

Tras pasar por Black Mirror o Humans, el actor se adentró en el mundo de las pandillas que acechan Londres con un personaje complejo que lo retó física y mentalmente. Gangs of London, del director galés Gareth Evans, sigue la historia de Sean Wallace (Joe Cole), un joven impulsivo que, tras el asesinato de su padre, el criminal más poderoso de Londres, debe tomar las riendas de la pandilla en un escenario tortuoso de incertidumbre y falta de confianza de quienes le rodean.

Elliot Finch (Dirisu) se convierte en el aliado de Wallace y pronto se ve involucrado en la organización criminal más grande de Londres, todo desde una visión cinematográfica de Evans que a ratos rememora películas como El Padrino. “Elliot es parte de una pandilla pero está justo debajo de la pirámide, es una de las fuerzas de bajo nivel pero tiene muchas ambiciones para escalar, quiere más responsabilidades, más poder y determinación dentro de la organización y las razones por las que no va a parar no son tan obvias”, menciona el actor.

coreografías

Violencia brutal, acción y drama son los elementos que conforman la serie y que hicieron que Dirisu se preparara arduamente para las complejas coreografías y la creación psicológica de su personaje. “Uno de los retos más grandes fue que Elliot es casi dos personajes a la vez sin tener un desorden de personalidad, es alguien diferente con cada persona y tiene que tener cuidado sobre qué revela de sí mismo”, asegura el actor y explica que llevarlo a la pantalla fue más complicado de lo que parecía. “Tenía que cuidar que él (Elliot) no se equivocara dentro de la trama y a la vez que yo no me equivocara al interpretarlo, fue muy difícil pero divertido”, apunta. Además pasó un mes entrenando las coreografías de acción para que las escenas fueran creíbles. Haber interpretado a Muhammad Ali en la obra de teatro One Night in Miami le dio las bases para hacerlo.

La serie recibió buenas críticas cuando se estrenó en abril en EE.UU. e Inglaterra y ahora continúa su camino y llega mañana a la plataforma de Starzplay.