La popular frase “Houston, tenemos un problema” acompaña inevitablemente el recuerdo de la fallida misión lunar del Apolo 13, cuyo 50 aniversario se cumplió el sábado y no se va a poder celebrar a causa del covid-19. La NASA ha suplido las ceremonias y actos presenciales en conmemoración del lanzamiento del cohete desde Cabo Cañaveral (Florida) con la divulgación de una ingente cantidad de fotografías, grabaciones e imágenes de vídeo. También estrenó el viernes el programa televisivo Apollo 13: Home Safe, que contiene entrevistas con dos de los tres protagonistas de la misión, que siguen con vida, y directores de vuelo e ingenieros de la NASA.La revista Astronomy se ha adelantado al 50 aniversario de lo que la NASA llamó “un fracaso exitoso” -aunque el Apolo 13 no fue capaz de llegar a la Luna, no hubo pérdida de vidas humanas- con la publicación en su número de abril de una entrevista con el comandante de la misión, James Lowell, de 92 años. El veterano astronauta hace memoria y, además de comentar aspectos técnicos, habla de cómo la superstición de atribuir al número 13 la mala suerte se materializó en aquel viaje, entre otros temas. Se supone que “los que trabajamos para el Gobierno en la NASA no creemos en mitos como el número 13, pero ocurrió. Cuando repasas el vuelo y analizas la misión en toda su extensión, ves que estuvo plagada de malos presagios y mala suerte desde el principio”, dice Lowell, quien inicialmente iba a participar en la misión Apolo 14 pero pasó a la del número que “va detrás del 12”.

El número 13 marca también el día en el que de camino a la Luna, un cortocircuito provocó una explosión en un tanque de oxígeno del módulo de servicio y la caída del sistema de energía eléctrica. Lowell, interpretado en el filme Apollo 13 (1995) por Tom Hanks, pronunció ese día la famosa frase “Houston, tenemos un problema”, cuando comunicó al centro de control, situado en esa ciudad texana, que algo andaba mal. Gracias al plan puesto en marcha por controladores e ingenieros de la NASA una vez abortado el programa para el alunizaje, los tres astronautas, Lowell y los dos pilotos que iban a alunizar, John Swigert Jr., fallecido en 1982, y Fred Haise Jr, de 86 años, pudieron regresar sanos y salvos. El módulo lunar, que usaron como lancha salvavidas, cayó al Pacífico el 17 de abril, cinco días, 22 horas y 54 minutos después del lanzamiento del cohete Saturno V desde la plataforma 39A del centro espacial Kennedy.

El centro, que el 20 de julio de 2019 celebró por todo lo alto el 50 aniversario de la misión Apolo 11, la primera en la que un hombre pisó la superficie lunar, está cerrado al público desde el 16 de marzo, para evitar contagios de covid-19. Para Lowell, el viaje del Apolo 13, que tenía como uno de sus lemas Ex Luna Scientia (desde la Luna al conocimiento), fue el cuarto de su carrera como astronauta. En el Apolo 13 “era la primera vez que realmente íbamos a explorar o descubrir la Luna. Las (dos) primeras, Apolo 11 y Apolo 12, eran simplemente máquinas de decir: podemos hacer el trabajo. Aquí está”, declara Lowell en Astronomy. Una vez en la Luna, la misión se iba a realizar en un lugar conocido como Fra Mauro, donde las misiones Apolo 11 y 12 habían recogido materiales. “Desafortunadamente no pudimos lograr el objetivo”, afirma Lowell.